Dos médicos declaran que consideraban a Ruano un compañero de profesión

Dos médicos, Antonio Lucea y Remedios Novo, esta última citada a declarar en el sumario que se instruye por presunto intrusismo, estafa y asesinato contra Miguel Ángel Ruano, han declarado que creían que éste era un compañero de profesión. Lucea, propietario de una clínica especializada en chequeos, afirma que Ruano acudió allí en algunas ocasiones con pacientes. Por su parte, Remedios Novo niega haber sido la responsable de la medicación de María Cristina Crerar, que, según el auto de procesamiento, aceleró la muerte de la anciana, de 85 años. Ruano está acusado de haber acelerado la muerte de la paciente para apoderarse de casi cuatro millones de pesetas que tenía en su cartilla de ahorros.En el recurso de reforma presentado ante el juez los abogados defensores afirman que Ruano, en el aspecto estrictamente clínico o médico, no ejercía, ni ejerció jamás, cometido alguno". Sin embargo, en el mismo recurso se reconoce que en una declaración indagatoria al juez instructor de la causa, el pasado 1 de agosto, Ruano declaró haber ejercido la profesión médica. Los abogados justifican el contenido de estas declaraciones por lo "trastornado y confuso" que se hallaba su defendido ante la acusación de asesinato.

El doctor Antonio Lucea, que dirige una clínica especializada en chequeos en el número 38 de la calle de San Bernardo, manifestó haber conocido accidentalmente a Miguel Ángel Ruano hace aproximadamente ocho años. "Nos presentó casualmente un amigo común", recuerda, "y desde entonces coincidimos en varias ocasiones. Mi relación con él era la normal entre dos personas que salen a tomar unas copas con otros amigos, pero no mantuvimos vinculación profesional, aunque más de una vez me pidió que le dejara una consulta en mi clínica para ver a un enfermo concreto". Lucea añadió que estaba convencido de que Ruano era médico. "Creo que trabajaba en medicina interna", señaló, "pero no tengo constancia de que realizara intervenciones quirúrgicas. La última vez que le vi, hace aproximadamente un año y medio, era cuando tenía en proyecto asumir la dirección de la clínica La Fe".

Por su parte, la doctora Remedios Novo, que trabajaba en la clínica La Fe durante el período en que la sociedad presidida por Miguel Ángel Ruano -Medical .Health Center- subarrendó el centro médico, afirmó haber creído siempre que el ahora procesado era médico y haber presenciado actuaciones de Ruano como tal.

El recurso presentado por los abogados de Ruano estima que el auto de procesamiento sólo tiene en cuenta "la falsa base de una declaración", la de la doctora Remedios Novo, calificada además de "inveraz". Según el recurso, la doctora Novo, pese a manifestar ante el juez que los medicamentos administrados a la anciana la base de Haloperidol y Valiumno eran los adecuados para María Cristina Crerar, "era quien se los prescribía y suministraba". Remedios Novo desmintió estas acusaciones y afirmó: "Ruano se hizo cargo de la paciente y fue él quien prescribió los medicamentos que le fueron suministrados".