Las orquestas españolas buscan instrumentistas en el extranjero

La situación creada en la Orquesta Nacional es "el resultado de tanta desidia", afirma Antonio Gallego, catedrático de Musicología, que lleva 15 años en la enseñanza. "El conservatorio", continúa Gallego, "se ha convertido e la guardería más barata de Madrid". Federico Sopeña, 33 años enseñando Estética e Historia de la Música, declara: "Llevo 15 años pidiendo una escuela superior de violín, porque al terminar los estudios se debe seguir aprendiendo. Los instrumentistas no salen suficientemente preparados". El director de la orquesta, Jesús López Cobos, por su parte, se refirió re cientemente en Santander a la falta de buenos instrumentistas españoles y señaló la necesidad de traer profesionales de fuera.Según datos del Ministerio de Educación, en la actualidad estudian música en España cerca de un cuarto de millón de personas Sin embargo, Jesús López Cobos y el tribunal formado por Víctor Martín, concertino de la Orquesta Nacional de España; Máximo Valverde, inspector de la orquesta; el pianista Luis Galve; el solista de guitarra Ernesto Bitetti, y los solistas de cada instrumento de la agrupación sinfónica, no encontraron más que cinco profesores para la Orquesta Nacional y dejaron desiertas 22 plazas.

El tribunal, que emitió su fallo el pasado día 2, sólo otorgó las dos plazas de percusión, la de flauta, la de trombón y una de contrabajo. El resto queda pendiente de otras oposiciones y, mientras tanto, López Cobos tiene la intención de contratar, como ya declaró en una conferencia de prensa celebrada el pasado viernes en Santander, a instrumentistas extranjeros, que no podrán acceder a la plantilla. Una "triste" solución, según López Cobos, dado "el alto índice de paro que hay en España". "No obstante", añade, "la contratación de músicos extranjeros es una práctica habitual en todas las orquestas del mundo". La Junta de Gobierno aprobó una cláusula según la cual sólo el 10% de los instrumentistas pueden ser extranjeros. López Cobos informó a este periódico que la orquesta contratará hasta 20 maestros extranjeros, lo que significa no cumplir di cha cláusula -el 10% equivaldría a 12 músicos- A este respecto, el catedrático Antonio Gallego ha declarado: "Que metan gente de fuera de una vez, a ver si reaccio nan. La orquesta de la Zarzuela está llena de extranjeros".

Menos traumáticas

Las oposiciones de julio pasado en la Orquestra Ciutat de Barcelona han sido menos traumáticas que las de 1984, en las que entraron ocho extranjeros con contrato laboral indefinido. En la reciente convocatoria han superado la prueba siete españoles y tres extranjeros que completan el cupo del 10% de extranjeros permitido en la orquesta. Se han cubierto cuatro de las 11 plazas de violín (dos extranjeros); una de viola, de las dos convocadas (un extranjero); dos de violonchelo, de las dos vacantes; una de contrabajo; una de clarinete bajo, y una de piano. En la actualidad existen 130 conservatorios y 250.000 alumnos, aunque se calcula, que sólo el 5% de los matriculados, termina sus estudios. La media nacional es de 80 alumnos por profesor, mientras en Europa es de cinco o de un máximo de 10. "La crisis auténtica", dice Federico Sopeña, recién jubilado, uno de los hombres que durante más años ha impartido música en España, "es la de los conservatorios, donde junto a los que tienen verdadero interés estudia mucha gente que sólo quiere saber un poco de música o pasar el rato".El Conservatorio Municipal de Música de Barcelona iniciará el próximo curso una descentralización de las enseñanzas para evitar, según declaró el director, Marçal Gols, la masificación. No obstante, la medida no ha sido bien acogida por alumnos y, profesores y éstos incluso presentaron una moción de censura a la dirección. La descentralización significa que los cursos elementales de solfeo se impartirán en cinco escuelas municipales de Barcelona.

En España hay más de 2.300 profesores de música. En los 130 conservatorios que existen -el Ministerio de Educación tiene previsto inaugurar varios más el curso que viene- se imparten todos los ciclos de la enseñanza musical: desde los primeros cursos de solfeo hasta el virtuosismo.

Gallego añade: "Hay una verdadera masificación, sobre todo en los niveles inferiores, y el conservatorio de Madrid se ha convertido en la guardería más barata de Madrid". Luis Galve, pianista y uno de los miembros del tribunal para las plazas de la Orquesta Nacional, reincide en la masificación de las clases: "Los profesores no se pueden dedicar a todos los alumnos. En otros países tiene seis o siete, y además los eligen ellos. Si el profesor tiene 80 alumnos y cuatro valen mucho, acaban pagando esos cuatro".

Sin voluntad política

"Yo he expuesto esta situación" continú a Gallego, "a muchos, ministerios de Educación, de varios colores, y he constatado que no hay voluntad política de solucionar el problema". Según Gallego, este Gobierno tenía un interesante programa de educación musical, pero no lo ha cumplido; "lo que interesa es el gran espectáculo". Según López Cobos, hace ya año y medio que el Consejo de la Música hizo un llamamiento a este respecto, aconsejando una profunda reforma de la enseñanza musical. "Recomendamos al Ministerio de Cultura que creara una comisión interministerial que se encargara de perfilar las directrices. Postenormente se jios pidió un estudio sobre cómo debla ser esa reforma, cosa que hicimos. Un año y medio después, ni se ha creado la comisión ni se nos ha contestado nada sobre los estudios realizados".El desánimo cunde entre los profesionales de la enseñanza. "Hay también una gran crisis de vocaciones", se queja Sopeña, "y tal como viven los profesores, a los intérpretes no les hace ninguna ilusión ser profesores. Es significativo que Narciso Yepes no enseñe guitarra". Gallego asegura que "aunque ahora mismo se pusieran los conservatorios en el nivel que deben estar, los resultados son muy lentos y tardarían 10 o 15 años en verse".

Los profesores coinciden con López Cobos, quien manifestó en Santander que el mayor problema se encuentra en los profesores de instrumentos de cuerda. "Hay mayor tradición para el metal", dice Luis Galve; "la zona valenciana y las bandas salva en parte al metal". De las 22 plazas que quedaron vacantes en la Orquesta Nacional, 20 son de cuerda. "En el momento actual", dijo López, Cobos, "sigue siendo absolutamente necesario traer instrumentistas de fuera". Y añade: "Estoy llevando esta negociación, y dependiendo de su resultado seguiré o no como director de la Orquesta Nacional".