Una feria que mueve muchos millones
La Feria del golf del Open Británico comenzó en 1961 con tres tiendas que tan sólo se dedicaban a la venta y promoción de bolas. En cuestión de años, la Golf Exhibition, como se llama a esta feria, se ha trasladado a una gran carpa que reúne a 105 compañías comerciales en 240 tiendas, que facturan más de un millón de libras esterlinas (más de 230 millones de pesetas) en los siete días de torneo. "No se puede precisar con exactitud en cuánto se sobrepasa ese millón, pero si se multiplica el mínimo de 30 libras, que pueden llegar a gastar el 65% de los 140.000, espectadores que pasan durante la semana del Open por las tiendas, se pueden hacer una idea", manifestó John Ratcliffe, representante de la firma encargada de organizar la feria. El Open Británico, a pesar de no tener una firma patrocinadora detrás suyo, mueve a todo el mundo de la publicidad. Mientras los aficionados gozan en el campo con los birdies o bogeys de sus favoritos, dentro de la feria se libra una batalla entre las casas comerciales más importantes desde Dunlop, Slazenger, Wilson o Spalding, con distintas marcas de prendas, de bolas, zapatos, guantes y hasta paraguas."Esta tienda está montada por el Patronato de Turismo de la Costa del Sol", explica Pablo Goizueta, manager ejecutivo de la compañía Guadalmina en Málaga. "Aquí nos reunimos distintos socios, campos de golf y hoteles". Lo más importante para todos los empresarios, es darse a conocer a los aficionados que acuden al torneo. "Aunque ahora no se puede decir cuántos clientes irán a la Costa del Sol, los resultados de exponernos aquí son positivos", señala Goizueta. La oferta más barata para dos personas por una semana en la costa, incluido desplazamiento, hotel con desayuno y partido de golf, es de 200 libras esterlinas (unas 26.000 pesetas).
Keith Hewitt, relaciones públicas de la compañía Southern Golf Spain Property, que se encarga de promocionar distintas zonas inmobiliarias, considera positiva esta promoción: "Aquí les proponemos a los clientes que vayan a jugar al golf a España donde pueden hacerse con una casa justo al lado del campo y del mar". Maribel Matthews, representante de la urbanización de Los Hidalgos, cerca de Sotogrande, señala que "el 90% de los clientes son británicos, jubilados que han ahorrado mucho dinero y que desean invertir su dinero al lado de un campo de golf con sol todo el año".
Ballesteros ha sido la estrella de la tienda de Slazenger, donde presentó un juego de palos, Nuevo Supremo, cuyo coste es de 520 libras. Esta compañía ha renovado el contrato con el español por cinco años, que darán a Ballesteros unas ganancias superiores a las 100.000 libras (unos 13 millones de pesetas) que recibe Bernhard Langer por anunciar a la marca rival, Wilson. El día de la presentación, Ballesteros fue custodiado por 12 policías para resguardarle de los numerosos aficionados que querían un autógrafo.
