El Banco Hispano Americano renuncia a participar en el capital social del Commerzbank

El Banco Hispano Americano, que tenía que empezar a hacer efectiva la adquisición de acciones del Commerzbank en el presente mes de julio según el acuerdo alcanzado hace ahora un año, no ejercerá dicha opción y volverá a vender a la entidad alemana los bonos que adquirió en 1984.El Commerzbank mantiene su participación accionarial del 10% en el Hispano, lo que supone que es el primer accionista del tercer banco privado nacional. Esta decisión fue tomada ayer en el consejo de administración de la entidad, a la que asistió por primera vez el representante del Commerzbank Jurgen Reimnitz. El nuevo acuerdo será firmado y anunciado oficialmente hoy por los dos bancos.

El presidente del Hispano, Claudio Boada, comunicó ayer a los miembros del consejo de administración de la entidad el nuevo acuerdo al que se ha llegado con el Commerzbank que modifica sustancialmente el alcanzado a principios del verano pasado, cuando era presidente Alejandro Albert.

En aquel momento las dos entidades acordaron realizar un intercambio de acciones por la que el banco alemán adquiría de forma inmediata el 10% de las acciones del Hispano, mientras que el banco español compraba una emisión de bonos convertibles en acciones por valor de 140 millones de marcos alemanes y se comprometía a adquirir en la bolsa alemana acciones del Commerzbank hasta el 2,52% del capital.

De esta forma el Hispano, cuando convirtiera los bonos en acciones y adquiriera el resto en la bolsa poseería el 7,5% del capital de la entidad alemana, equivalente al 10% del capital del Hispano.

Los problemas del Banco Hispano, de su filial el Urquijo Unión, y el relevo en la presidencia, han hecho que se modificaran las previsiones sobre el cumplimiento de dicho acuerdo. El Hispano adquirió la emisión de bonos, que deberían empezar a convertirse en acciones durante estas semanas. Desde el principio de su presidencia, Claudio Boada se planteó la conveniencia de renegociar el acuerdo con el socio alemán de forma que éste mantuviera su inversión en el Hispano y él pudiera desprenderse de su compromiso.

Cumplir el coeficiente

Las razones que están detrás de la desinversión del Banco Hispano en su participación extranjera se concretan en la necesidad de adecuarse a la nueva normativa sobre recursos propios recientemente aprobada por el Gobierno y en la política de máxima rentabilización de la actividad financiera del Banco Hispano Americano.El nuevo coeficiente de garantía, que entrará en vigor una vez que se publique en el Boletín Oficial del Estado el reglamento que lo desarrolla, exige fuertes cantidades de recursos propios -capital o reservas- para respaldar las inversiones en determinados activos como son las participaciones accionariales en otros bancos.

El Banco Hispano Americano, dada la baja rentabilidad obtenida en los últimos ejercicios, tiene una estructura de recursos propios bastante baja en relación a la que se le va a pedir a partir de ahora. Por ello ha iniciado una decidida política de desinversiones entre las que se encuentran la venta del edificio de Azca -que iba a ser su nueva sede social-, la de la empresa Carbonell y que culmina, por ahora, con la venta de sus participaciones en el Banco Herrero y la del Commerzbank.

La desinversión del Hispano supone recuperar el equivalente a los 140 millones de marcos que puso hace ahora un año, compensados por la diferencia de cambio de las monedas y el cobro de los intereses que producían los bonos que ahora desaparecen.