Estos años de austeridad
El Madrid es la excepción al invertir en fichajes tanto como el resto de equipos de la categoría
La regresión y la caída de precios caracteriza el mercado futbolístico de esta temporada en Primera División. No existe el movimiento de fichajes y traspasos de otros años. Las arcas de los clubes están vacías. Sólo existe una excepción, la del Real Madrid. El club madridista ha invertido en fichajes tanto como el resto de los demás equipos de Primera División. El Real Madrid es también el único club de la categoría que estrena presidente y junta directiva. Los nuevos dirigentes suelen llegar con ideas renovadoras, aires de superación, rupturas de continuismo y ... jugadores nuevos. El paro, a partir del 1 de octubre próximo, puede verse incrementado con futbolistas.
Un régimen austero se ha impuesto en el mercado de fichajes de jugadores en esta temporada. "Los dirigentes futbolísticos parece ser que por una vez tienen algún que otro remordimiento de conciencia. Los clubes profesionales confesaron más de 16.000 millones de pesetas de deudas, en cuya solución colaborará la Administración, y sería una afrenta gastarse cantidades importantes en fichajes", comentó un dirigente federativo. Un compañero fue más expresivo: "Han visto las orejas al lobo".Un gerente de club, como Iñaki Otegui, de la Real Sociedad, aseguró, por su parte, que "los ingresos de la temporada pasada se han reducido considerablemente sobre los presupuestados. A partir de esta temporada la Liga Profesional va a exigir a los clubes presupuestos equilibrados. Los directivos habrán de responder con sus avales personales de los desfases presupuestarios que se produzcan".
Régimen de austeridad
No es extraño, por tanto, que el secretario general y asesor jurídico de la Liga Profesional, Jesús Samper, confiese: "No va a haber esta temporada tanta alegría en fichajes como se registró en otros años". La ronda de presentaciones oficiales de los clubes de Primera División se inició el pasado miércoles con el Valladolid. Apenas contó con un par de novedades que presentar a sus aficionados.
Esta será la tónica general que impere en la mayoría de los clubes de Primera División. Equipos como el Barcelona -contrató a Amarilla en el transcurso de la pasada temporada-, Athlétic de Bilbao y Spórting, todos ellos participantes en competiciones europeas, no sólo no han fichado ningún jugador, por el momento, sino que traspasaron o prescindieron de hombres destacados, como el club gijonés, con el intemacional Maceda. Otros equipos como la Real Sociedad, Betis y Cádiz, por ejemplo, siguen la misma política de ahorro.
Antonio Baró, presidente de la Liga Profesional, la patronal del fútbol, abogado de prestigio que preside un club como el Español de Barcelona ya aventuró hace meses la realidad de hoy. "La nueva reglamentación laboral de los futbolistas incide en reducción del número de jugadores en cada plantilla y también en la promoción del fútbol base. Estas medidas, además, traen consigo el paro de los jugadores", declaró el presidente de la patronal del fútbol.
Y media hora para el 'bocata'
"Solo falta ya colocar el reloj para que los futbolistas fichen y que se les conceda media hora para tomarse el bocadillo", comentó con cierta ironía un presidente de Primera División. El fútbol, día a día se ha convertido en una actividad profesional y laboral más, con las consecuencias que ello lleva consigo en las empresas, en este caso, en los clubes.
Al futbolista se le incluirá en el régimen general de la Seguridad Social a partir del próximo mes de octubre, según la AFE, y desde el 1 de enero de 1986, según la Liga Profesional. Los futbolistas, a partir de ese momento, como un trabajador más, podrán recurrir al paro si no encuentran trabajo, si no son contratados por club alguno.
Los clubes, con la inclusión de los futbolistas en el régimen general de la Seguridad Social, verán incrementados sus gastos. Se asegura que entre un 60% y un 80% de los presupuestos de los clubes corresponden a pagos a sus jugadores. "Habrá que apretarse el bolsillo", es la frase que algunos dirigentes dicen con la boca pequeña.
José López, coordinador gene ral de la AFE, justifica el escaso movimiento de fichajes para la próxima temporada a "la confusión que se ha organizado entre clubes y jugadores sobre las in demnizaciones por formación y promoción de los futbolistas. Ahora es el mejor momento para fichar futbolistas. Tenemos noticias de que algún club de Segunda División está dispuesto a romper ese pacto de caballeros y a no abonar una sola peseta por el fichaje de un jugador".
Sólo dos jugadores extranjeros, prácticamente desconocidos, sin renombre alguno, llevan fichados hasta hoy los equipos de Primera División, lo que da idea de la austeridad impuesta. Se trata del chileno Aravena, ficha do por el Valladolid, y del danés Donnerup, por el Rácing de Santander, clubes que posiblemente luchará por evitar el descenso de categoría.
Fichajes más sonados
Los fichajes más sonados realiza dos hasta el momento para la próxima temporada, además de los madridistas Hugo Sánchez, Maceda y Gordillo, se reducen al santanderino Quique, fichado por el Atlético de Madrid, que también contrató a López, al que el Murcia dio la carta de libertad. El Español fichó al valencianista García Pitarch, al aprovecharse de un descuido del Valencia, y a Menchaca, del Sestao.
El Hércules, a punto de descender la pasada temporada, se puede considerar el equipo que mayor número de refuerzos ha conseguido: Juan Carlos, del Sevilla; Mestre y Botella, del Castellón; Totó del Málaga, Albadalejo, del Murcia, y Carlos, del barcelona Atlétic. Otro club con buen número de refuerzos es el Zaragoza, que recogió los retales madridistas de Pineda y Fraile y también Pardeza, del filial del Madrid, el Castilla. El Osasuna, que este año debuta en competición europea, en la Copa de la UEFA, fichó a Sabido, del Mallorca, y a Sola, al que el Athlétic dejó en libertad. El Sevilla se limitó al intercambio de Juan Carlos por Sanabria y al fichaje de Estella.
Las Palmas, Cádiz y Celta, los tres ascendidos, no registran más refuerzos que el regreso de Juani, en el equipo canario; el entrenador, Paquito, en el conjunto gaditano, y las incorporaciones de los filiales Blanco, Lema y Gustavo, del Gran Peña, en el club vigués.
Las mayores dificultades no aparecen ahora al realizar nuevos fichajes de jugadores. Son las renovaciones de los jugadores que acaban sus contratos los que registran mayores complicaciones. Algún directivo de club, de todos modos, prefiere no hablar de renovaciones, sino de nuevas contrataciones. Por regla general, aunque el derecho de retención ha desaparecido y las indemnizaciones por traspasos no han sido fijadas aún, con lo que los jugadores quedan libres de fichar por el club que quiera, predomina el mutuo interés por la renovación.
El escaso movimiento de fichajes que se registra este año también afecta a los jugadores. Los cinco jugadores que el Spórting de Gijón dio la baja al finalizar la pasada temporada, entre los que se encuentran hombres de la categoría de Ferrero o Nacho, aún no han econtrado equipo para la próxima campaña. Otro tanto se puede decir de los donostiarras Olaizola, Diego y Murillo, y la lista puede incrementarse. Jugadores del Valencia como Castellanos o Sampere, por otro lado, con contrato aún en vigor, prefirieron rebajar sus emolumentos firmados antes que marcharse de club, y con la carta de libertad.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.