El grupo carece de ambiciones políticas y de poder, dice su presidente, Alexander King
V. G., El presidente del Club de Roma, el escocés Alexander King, destacó como razón principal de la influencia que aquél ejerce su credibilidad, que radica, afirmó, en "el hecho real, que podemos asegurar, de que no nos mueve ninguna ambición política ni de poder" .
Ricardo Díez Hochleitner, presidente del capítulo español de la citada organización, señaló que el Club de Roma ha celebrado reuniones, las únicas que tienen carácter reservado, con distintos jefes de Estado y de Gobierno, obteniendo resultados que calificó de positivos.
La receptividad de los gobiernos del mundo ante los informes del Club de Roma es "grande, pero muy pequeña en relación con nuestras pretensiones", afirmó Díez Hochleitner.
En su opinión la capacidad de incidencia del Club de Roma tiene mucho que ver con la visión anticipatoria de las soluciones de futuro esbozadas mediante el análisis en profundidad, sin optimismos irresponsables, pero sí con esperanza, que realiza dicha organización.
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