Los fallos de la central de Almaraz son normales, según el Consejo de Seguridad Nuclear

Todos los problemas que ha tenido la central nuclear de Almaraz desde su puesta en marcha son análogos a los producidos en otras centrales españolas y extranjeras, y en ningún caso ha existido peligro ni para las instalaciones ni para la población próxima, según manifestó ayer en Mérida el presidente del Consejo de Seguridad Nuclear, Francisco Pascual, en su comparecencia ante la Comisión de Industria y Energía del Parlamento extremeño.

Los miembros del Consejo de Seguridad Nuclear fueron recibidos con la protesta de un grupo de manifestantes pertenecientes a diversas organizaciones pacifistas, que portaban pancartas con textos como "Junta continúa la lucha. No cedas ante Madrid", "Antes las eléctricas escondían información y ahora la Junta engaña. a la población", en clara alusión al último fallo registrado en la central, que, una vez conocido por el Gobierno regional, fue silenciado ante la opinión pública extremeña. La policía nacional intentó detener a una persona que portaba una pancarta con el texto: "Ibarra, cómplice del terrorismo en Almaraz".En la exposición realizada para los miembros del Consejo de Seguridad Nuclear se pusieron de manifiesto todos los problemas habidos en Almaraz: fallos en los generadores de vapor, deslizamiento de los edificios, introducción intencionada de ácido sulfúrico en el circuito secundario, y otros.

En cuanto a los planes de emergencia, para el presidente del Consejo de Seguridad Nuclear, "hay medios que garantizan su funcionamiento durante 1985 y 1986", y opina que debe plantearse su financiación a partir de entonces.

El Partido Comunista de Extremadura calificó de insuficiente la comparecencia, habida cuenta de que ante determinadas cuestiones técnicas los responsables del Consejo solicitaron tiempo para dar la respuesta por escrito.

El grupo regionalista Extremadura Unida, cuya petición de paralización de la central hasta que no se corrijan con total garantía las anomalías fue rechazada por la mesa de la asamblea, se sentía insatisfecho por no haber encontrado respuestas adecuadas a sus preguntas. El Grupo Popular, que aprobó la labor del Consejo, así como la explotación que las eléctricas hacen de las centrales, a través de su diputado Vega del Barco, lamentó que el Consejo no informara a los extremeños.

Antonio Rosas, portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, ratificaba la postura de su partido: "Sí a Almaraz, siempre que se garantice la total seguridad". Sobre Valdecaballeros señalaba que si no sigue adelante es debido no a problemas de calidad de construcción o de seguridad, sino a cuestiones de política energética".

Para el próximo domingo está convocada una manifestación en Navalmoral de la Mata para solicitar una vez más el cierre total de Almaraz. Apoyan esta manifestación movimientos ecologistas, agrupaciones pacifistas, partidos extraparlamentarios y diversos ayuntamientos, entre ellos algunos gobernados por los socialistas.