El PCI estudia la convocatoria de un congreso extraordinario

El Partido Comunista italiano (PCI), tras el retroceso experimentado en las últimas elecciones administrativas, se plantea la convocatoria de un congreso extraordinario para un estudio a fondo de su línea política, con la posibilidad de un relevo en la secretaría del partido.La noticia de que podría anticiparse al año próximo el congreso ordinario que debería celebrarse, según los estatutos, en la primavera de 1987, se filtró ayer en una reunión de la dirección del partido a la que había sido invitado -además de algunos secretarios regionales- Luciano Lama, secretario general de la CGIL, el sindicato más importante de Italia, de orientación comunista. Dicha dirección deberá decidir si convoca para la semana próxima al Comité Central, órgano supremo del partido, o bien aplaza el examen del fracaso electoral.

La impresión que existía ayer en ambientes comunistas romanos es que se advierte una cierta prisa en aprovechar la ocasión ofrecida por el fracaso ante las urnas para replantear a fondo la cuestión del posberlinguerismo, para ofrecer a Italia una línea política clara. Está en juego también la decisión de mantener la voluntad de seguir en la oposición o de querer entrar en el ámbito del Gobierno, con todas las consecuencias que ello pueda acarrear. No pocos observadores sostienen que, en realidad, el PCI prefiere aún estar en la oposición a nivel nacional.

Mientras tanto, los democristianos demuestran una cierta prisa en trasladarse a Campidoglio, sede de la alcaldía romana, tras nueve años de ausencia forzosa. Ayer mismo, el casi seguro nuevo alcalde democristiano, Nicola Signorello, ex ministro, que era el primer candidato en la lista de su partido, se presentó ya con una larga entrevista a Repubblica como "el conquistador de Roma". Y el responsable nacional de la organizacíón del partido, el diputado Paolo Cabras, de la izquierda del partido, desmintió a este corresponsal que pudiera ser alcalde el miembro del Opus Dei Alberto Michelini: "Nuestro candidato", dijo, "fue siempre Signorello. Por eso encabezaba él la lista". A propósito de que el alcalde será democristiano, comentó: "Para nosotros Roma es muy importante, es todo un símbolo".