Redondo pide que el Gobierno "haga lo que quiera" sobre pensiones sin implicar a la Unión General de Trabajadores

"Que haga lo que quiera el Gobierno, pero que no implique a la UGT". Con estas palabras, Nicolás Redondo comentó ayer la posibilidad de que el Ejecutivo terminara aprobando la reforma sobre pensiones sin el consenso de la central socialista. Manifestó que la UGT no aceptará como tal organización, una reforma de la Seguridad Social en los términos que plantea el Gobierno, incluso en el caso de que "fueran ciertas las mejoras que dicen que ha prometido el Ejecutivo". Mientras tanto, el presidente del Gobierno, Felipe González mantuvo ayer en la Móncloa una reunión con la Federación de Pensionistas y Jubilados de UGT durante una hora y media en la que se abordó la anunciada reforma de las futuras pensiones.

Las afirmaciones del secretario general de UGT sobre el proyecto de reforma de pensiones de la Seguridad Social confirman opiniones de otros dirigentes sindicales que aseguran que en la cúpula de la organización estaba pesando una fuerte desconfianza hacia la veracidad de las promesas efectuadas en otras ocasiones por los representantes del Gobierno.A este respecto se hace notar que ni siquiera la revalorización automática que aparece en el proyecto del Gobierno garantiza el poder adquisitivo. Nicolás Redondo dijo que "si hubieramos aceptado que la subidas se hicieran sobre inflación prevista, el año pasado los pensionistas hubieran perdido tres puntos, porque los precios fueron más altos que las previsiones". En el proyecto del Ministerio de Trabajo no aparece, efectivamente, la revisión a final de año, aspecto que, según UGT, un representante del PSOE les aseguró que "puede solucionarse sin problemas".

Sobre la posibilidad de que el Gobierno termine aprobando la reforma sin el consenso de UGT, la opiniones de Redondo fueron compartidas por otros sindicalistas que, con palabras más duras, comentaron que "lo que no podemos hacer es avalar cualquier medida del Gobierno por impopular que ésta sea". Al mismo tiempo subrayaron que en el actual contencioso de UGT y el Gobierno influyen recelos provocados por antiguas actitudes del Gobierno. Así, se indica que ya en las negociaciones del AES el sindicato, por responsabilidad, hubo de "tragarse" propuestas que "hoy no estamos dispuestos a pasar".

Redondo insistió en que los lazos con el Gobierno y con el PSOE están rotos. Sin embargo, Felipe González se reunió ayer en la Moncloa durante hora y media con miembros de la Federación de Pensionistas del sindicato, informó Efe. Aunque en la reunión se abordó la futura reforma, los asistentes a la misma declinaron hacer declaraciones.

El secretario general de UGT volvió a insistir en que, aunque se afirme lo contrario, la central no ha recibido ninguna propuesta de modificación del proyecto de reforma. Ayer, la comisión ejecutiva del sindicato señaló que las filtraciones producidas en los últimos días eran "inexactas y cargadas de intención", a la vez que aseguraba que la UGT no negociaría ni con Gobierno, ni con PSOE esas medidas.

Por su parte, el comité federal de banca, cuyo secretario general Justo Fernández ha anunciado que no irá a la concentración de mañana -"las fiestas las elijo yo"- difundió otro comunicado, insistiendo en una reforma global que garantice una Seguridad Social pública y sin fondos de pensiones.