El nivel de integración de los productos Seat causa diferencias entre el INI y Volkswagen

El grado de integración de los futuros productos Seat, en relación a si los vehículos y sus componentes han de ser fabricados en mayor o menor grado en la empresa o por el sector auxiliar español y las consiguientes diferencias de plantillas, es una de las discrepancias contenidas en tres proyectos industriales que barajan el INl y Volkswagen, manifestó ayer en Barcelona Luis Carlos Croissier, presidente del INI.

La adopción de uno de estos tres diseños industriales tendrá importantes consecuencias en el volumen de la plantilla necesaria en Seat para los próximos años, añadió el presidente del INI, que rehusó concretar las diferencias de plantillas existentes entre los tres proyectos.El problema fundamental del futuro de Seat que se está barajando en las negociaciones para su integración en la multinacional Volkswagen, es, sobre todo, de política industrial, tecnología y capacidad de renovación de sus productos, con el objetivo de situarse competitivamente en la CEE, según afirmó Croissier. El capítulo de saneamiento financiero será tenido en cuenta en las negociaciones de ambas sociedades una vez exista un nivel de acuerdo sobre el diseño industrial de Seat, de modo que las necesarias aportaciones del INI serán el broche final final del futuro pacto -"el precio de la operación", las denominó Croissier"- De momento, el plan financiero previsto en la actualización del plan estratégico sigue su curso y la empresa recibirá este año inversiones de 56.000 millones de pesetas.

El INI, sin embargo, según afirmó su presidente, no está dispuesto a llegar a cualquier tipo de acuerdo con Volkswagen, sino que, por el contrario, se propone obtener garantías firmes de que el futuro de Seat no adolecerá de avatares como los ocurridos con la retirada de Fiat. Por ello, el acuerdo con la multinacional alemana, previsto en principio para julio próximo, puede retrasarse. El grupo público se propone tener en cartera soluciones alternativas para asegurar la pervivencia de Seat y estudiar otras soluciones, en el caso de que la asociación con Volkswagen no prospere de la forma prevista.

La adopción de una de las tres fórmulas en estudio, que contiene un abanico de posibilidades desde un importante nivel de integración -como el vigente en Seat- hasta un grado medio o mínimo -este ultimo defendido por Volkswagen- influirá también de forma notable en la industria auxiliar de la automoción española. Ese capítulo juega en beneficio de la postura española en las negociaciones. Ésta defiende el mayor nivel de integración posible, dado que la competitividad de la industria auxiliar del automóvil española en Europa se considera importante, según una de las conclusiones del estudio efectuado por la empresa auditora McKinsey.

Sanear el sector público

A un total de 196.000 millones de pesetas ascendió el pasado ejercicio la inversión efectuada por el INI en activos de empresas públicas. Croissier afirmó que Cataluña recibió 55.000 millones de pesetas, el 28% del total, dirigido, sobre todo, a inversiones eléctricas y a las centrales de Vandellós y Moralets. El presidente del grupo afirmó en una conferencia pronunciada en el Círculo de Economía que en los próximos tres años se propone obtener un INI flexible y saneado, que se transformará en un ente público, en lugar de su formulación actual de organismo autónomo, durante 1985. Croissier señaló que es necesario redefinir la composición del grupo, pero que no existe una voluntad general de privatizacíón. "Creo que el sector público español es necesario y que algunos subsectores han demostrado hacerlo mejor que el sector privado", dijo.Respecto a Iberia, Croissier afirmó que la empresa se ha capitalizado con 60.000 millones del INI y que podría obtener beneficios dentro de dos años.