Todos los grupos parlamentarios, de acuerdo en los principios la nueva ley Electoral

MadridLa Comisión Constitucional del Congreso, que estudia el proyecto de nueva ley electoral iniciará sus trabajos el próximo martes, cuando ya se ha alcanzado un acuerdo fundamental entre todos los grupos parlamentarios. Las últimas reuniones privadas para analizar el proyector finalizaron la noche del pasado jueves. Participaron en elllas el secretario general del Grupo Parlamentario Socialista, Eduardo Martín Toval; el portavoz del Grupo Popular, Miguel Herrero, y por la Minoría Catalana, Josep López de Lerma.

La Minoría Catalana consiguió en esta última reunión, realizada a puerta cerrada, que los socialistas rebajaran de un 25% a un 20% el mínimo de votos exigidos en una comunidad autónoma para tener acceso gratuito a los medios de comunicación públicos, entendiendo que la audiencia será exclusivamente la de esa comunidad. En esta ocasión el negociador nacionalista se dio por satisfecho. Esta impresión no es compartida por el PRD, partido que inspira Miquel Roca, y cuyos miembros esperaban que la campaña electoral de Convergència i Unió, principalmente cuando compareciera Roca ante la pantalla, fuera vista por todos los ciudadanos del Estado.

La única discrepancia que aún separa a la Minoría Catalana del proyecto del Gobierno se refiere al artículo 207 de la ley, donde se regula qué artículos tienen calificación de orgánicos y cuáles básicos. Este tecnicismo importa extraordinariamente a los nacionalistas, ya que de ello dependerá que Cataluña pueda o no regular sus propias elecciones.

El control de los gastos electorales es una de las novedades más destacadas de esta ley, limitándose por partido a un máximo de 2.500 millones de pesetas. Ningún particular o empresa puede donar a una determinada fuerza política que concurra a las elecciones más de un millón de pesetas. Todos los partidos tienen la obligación de abrir una llamada cuenta electoral en la que se registrarán los movimientos económicos. El posible donante tendrá que identificarse formalmente y quedará registrado su Documento Nacional de Identidad. La absoluta certeza de estar inscrito en el censo la tendrán los ciudadanos cuando reciban en su domicilio una tarjeta electoral. Si no es así, todo indica que por error no figura en el mismo.

"Esta no es una ley dramática y las bases del acuerdo ya están puestas", dijo ayer Miguel Herrero de Miñón, portavoz popular. Lo cierto es que la futura ley electoral recoge ampliamente los supuestos en los que se basó la de 1977, por la que se han regido todas las elecciones habidas hasta ahora en la España democrática desde ese año. "En un 90% es la ley que yo hice", dijo Herrero, autor casi exclusivo de la anterior ley emanada del Gobierno de UCD.