Renfe y sindicatos firman un convenio para dos años
El comité intercentros de Renfe decidió ayer desconvocar la huelga de 24 horas prevista para mañana, al llegar sindicatos y dirección a un acuerdo sobre el convenio colectivo. El acuerdo, cuya vigencia será de dos años, establece 6.000 nuevos ingresos en plantilla y una subida en 1985 del 6,8% sobre todos los conceptos salariales, con revisión anual según lo establecido en el Acuerdo Económico y Social, (AES). Para 1986, la subida será de un 4,5% sobre la masa salarial, equivalente al 105% del índice de precios al consumo registrado al final de este año.
Las centrales con representación sindical en Renfe (CC OO, UGT, Sindicato Libre Ferroviario y USO) y la dirección de la compañía firmaron en la tarde de ayer un acuerdo sobre el convenio colectivo, después de 11 reuniones y dos meses y medio de negociación. El acuerdo, que tendrá una vigencia de dos años, se consiguió tras 24 horas prácticamente ininterrumpidas de discusión iniciadas en la mañana del martes, en que la empresa anunció que rompería las negociaciones si los sindicatos no desconvocaban la huelga prevista para mañana.Los trabajadores de Renfe, para intentar modificar a su favor las posturas inicialmente duras de la empresa, realizaron una huelga de 24 horas el pasado 22 de febrero que paralizó el 80% de los servicios ferroviarios habituales. Posteriormente, dirigentes de UGT mantuvieron al menos dos reuniones con el ministro de Transportes, que algunos medios sindicales califican de decisivas para el acercamiento de las posturas.
El convenio de este año tiene un carácter preelectoral, al haberse comprometido los sindicatos a celebrar elecciones sindicales inmediatamente después de firmado el convenio. El acuerdo obtenido será debatido los próximos días en asambleas y podrá ser firmado oficialmente la próxima semana.
Aparte de la subida salarial del 6,8%, el acuerdo incluye una cantidad aún sin precisar destinada a mejorar las primas de producción más bajas, lo que significará una subida sustancialmente mayor para una parte importante de los salarios. Asimismo, recoge una cantidad superior a los 200 millones anuales para ayudas sociales y un día más de descanso cada dos semanas para los trabajadores "desarraigados" (aquellos que desempeñan su trabajo lejos de su domicilio).
De las debatidas contrapartidas exigidas por la empresa a la hora de presentar su oferta se introducen tres: la extensión de la jornada partida a determinados servicios, las polivalencias funcionales de ciertos trabajadores y la supresión de la reconversión previa a la hora de efectuar nuevas contrataciones. La dirección considera que estas modificaciones reducirán las horas extraordinarias y mejorarán la calidad del servicio. Sin embargo, estas modificaciones se harán con carácter voluntario y los trabajadores disconformes podrán solicitar traslado. Los afectados recibirán como compensación unas 500 pesetas por día de trabajo.
De los 6.000 nuevos ingresos pactados, la empresa contratará este año 3.500 personas y está abierta a revisar para 1986 la dimensión de la plantilla, que actualmente asciende a 69.394 personas, incluidos 2.000 militares en prácticas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.