España comprará gas a Argelia por valor de 220 millones de dólares en 1985

La modificación del acuerdo sobre suministro de gas argelino a España firmado ayer en Argel por los ministros de Asuntos Exteriores de ambos países, Fernando Morán y Ahmed Taleb Ibahimi, supone la reducción del suministro en 235.000 millones de termias en relación con el anterior acuerdo suscrito en 1977 entre la empresa Enagás y Sonatrach, señaló ayer el secretario general del Ministerio de Industria y Energía, Martín Gallego.

La visita de la delegación oficial española, encabezada por el ministro de Asuntos Exteriores y de la que formaban parte los secretarios generales de Industria y Energía y de Comercio, Luis Velasco, tuvo como resultados positivos, al margen de la firma del protocolo de enmienda del contrato del gas, el anuncio de la visita oficial del presidente del Gobierno Felipe González a Argel en el próximo mes de marzo y la devolución de la visita a Madrid del presidente argelino, Chadli Benyedid, en fecha no determinada, así como la convocatoria para el primer día del mes de abril de la comisión mixta de ambos países para tratar de impulsar las relaciones económicas, paralizadas desde hace dos años a raíz del contencioso del gas.El nuevo acuerdo de suministro de gas, además de aceptar la reducción de la cantidad de gas licuado que se venderá a España hasta el año 2004, establece la indemnización de 500 millones de dólares (92.500 millones de pesetas) a Argelia repartido en 300 millones de dólares en concepto de la diferencia de precio pagado por España y el facturado por Argelia por el gas recibido y 200 millones por las inversiones realizadas por Argelia para asegurar el suministro a España. La cifra final de indemnización es la mitad de la solicitada por las autoridades argelinas ante los tribunales internacionales que estudiaban el contencioso entre las dos naciones.

Otras claúsulas del nuevo protocolo establecen que España pagará el "precio europeo" -3,89 dólares- y que no pagará más de lo que lo hagan el resto de países europeos mientras dure el contrato. En 1985, España importará gas de Argelia por valor de 220 millones de dólares (unos 41.000 millones de pesetas) y en los próximos años las cantidades irán creciendo en la medida en que vayan entrando en funcionamiento las instalaciones necesarias para poder utilizar el gas natural argelino en la zona centro y en el País Vasco, así como la transformación de algunas plantas de fabricación de amoníaco, que actualmente utilizan como materia prima las naftas derivadas del petróleo y pasarán a consumir gas natural.

El consumo de gas en España, que representará el 2,7% del total de energía primaria consumida en 1985, pasará a ser algo más del 7% en 1992, en función de las importaciones procedentes de Argelia y de Libia.

Los ministros de Asuntos Exteriores de ambos países suscribieron ayer un comunicado conjunto en el que, además de referirse a la necesidad de que el Magreb y el mar Mediterráneo sean una zona de paz y recuerdan la urgencia de una solución política negociada de la cuestión, del Sáhara occidental, se comprometen a reforzar las relaciones bilaterales en todos los terrenos. En especial se citan las relaciones económicas, paralizadas por los desacuerdos en torno al suministro de gas, que para España habían representado hasta 1983 una parte importante del comercio exterior y que descendieron de forma alarmante en los dos últimos años.