El plan de reconversión de bienes de equipo eléctrico cifra en 6.000 los trabajadores excedentes

Antes de que finalice el presente mes de enero, el sector de bienes de equipo eléctrico habrá presentado al Ministerio de Industria su plan sectorial de reconversión Los excedentes de plantilla inicialmente previstos rondan los 6.000 trabajadores -aproximadamente un 50% de la plantilla global del sector- y es más que previsible que alguna de las grandes empresas del sector, fundamentalmente General Eléctrica Española o Westinghouse tengan que desaparecer o fusionarse.El sector de bienes de equipo eléctrico ha llegado a la reconversión de una forma sorprendente, ya que oficialmente ésta ya se ha acabado. Sin embargo, a principios del presente mes de enero el ministro de Industria, Carlos Solchaga, se reunió con la plana mayor del sector y le abrió las puertas a la reconversión. Tras esta reunión inicial, que sirvió para fijar el marco reconversor, el pasado lunes representantes de Industria y del sector terminaron de perfilar el marco y el calendario.

Tras la presentación, por parte del sector, del estudio macroeconómico antes de que finalice el presente mes, el siguiente paso que dar será la presentación al Ministerio de Industria de los planes individuales de cada una de las empresas que componen el sector. El dato más significativo es que de los más de 12.000 trabajadores de bienes de equipo eléctrico, aproximadamente la mitad son excedentes. El otro problema grave y que llegó a bloquear la reconversión en su día es la coexistencia en un mercado sumamente estrecho -el de generación- de tres multinacionales, General Eléctrica Española, Westinghouse y Brown Boveri, condenadas a fusionarse o desaparecer.

De acuerdo con todas las fuentes consultadas, el auténtico cuello de batella de esta incipiente reconversión sectorial se encuentra en la empresa General Eléctrica Española. Las relaciones entre la filial de la multinacional norteamericana y el Ministerio de Industria llegaron a ser muy tensas ante una operación nada clara planteada por la empresa, cuyo final pudo haber sido el pase de la misma al sector público. Tensiones que estuvieron marcadas además por la amenaza constante de que la casa matriz norteamericana abandonara a su suerte a su filial española.

El futuro de General Eléctrica

La reciente aparición de un estudio de viabilidad, llevado a cabo por la consultora ICSA, en el que la multinacional norteamericana General Electric cambiaba sus planteamientos comprometiéndose a aportar a la empresa española en determinada condiciones unos 2.500 millones de pesetas, ha podido ser la llave que desbloqueara la situación. Eso y el hecho de que los problemas originados por la reconversión naval en el País Vasco hayan amainado.General Eléctrica Española cuenta en su factoría de Bilbao con una plantilla de unos 2.700 trabajadores, y el Ministerio de Industria intentó por todos los medios, con éxito, que el problema no estallara mientras estuviera vivo el conflicto de los astilleros vascos.

Por otra parte, el Ministerio de Industria tiene a su favor otras bazas que le permitirán negociar con cierta comodidad con General Eléctrica Española, yaque la amenaza de conflictividad en el País Vasco se ha reducido y el paso de la empresa al ámbito del INI es prácticamente imposible. General Eléctrica Española tiene en estos momentos dos sentencias en contra del Tribunal de Cuentas y una del Tribunal de Defensa de la Competencia, y en las tres puede haber exigencias de devolución de dinero.