Los GRAPO obtienen 10 millones de pesetas de un directivo de una filial de Telefónica

Un comando de la organización terrorista Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO) compuesto por tres personas, obtuvo ayer en Madrid un botín de 10 millones de pesetas mediante el impuesto revolucionario, informó una alta fuente del Ministerio del Interior. La víctima fue José Antonio Mendoza, directivo de la empresa Hispano Radio Marítima, con sede social en la calle de Jorge Juan, número 6, de Madrid.

Esta extorsión es la mayor, por su cuantía económica, que realizan los GRAPO desde que adoptaran la práctica de exigir el impuesto revolucionario, hace prácticamente dos años.Según la fuente informante, Mendoza fue retenido unas horas por el citado comando y puesto en libertad posteriormente, tras obtener los 10 millones de pesetas exigidos, que momentos antes habían sido retirados en efectivo por un empleado de Hispano Radio Marítima de varias sucursales bancarias, mediante tres talones. Los secuestradores de Mendoza advirtieron a este empleado que darían muerte a su jefe si alertaba a la policía y no entregaba la cantidad exigida.

Hispano Radio Marítima es una empresa filial de la Compañía Telefónica Nacional de España (CTNE), dedicada principalmente a la fabricación de equipos de telefonía destinados a los buques. El 100% del capital de Hispano Radio Marítima está en poder de la CTNE, empresa paraestatal.

Es también la primera vez que una empresa con capital del Estado paga a una organización terrorista, en contra de las recomendaciones del ministro del Interior, José Barrionuevo.

Concretamente, las autoridades se opusieron públicamente al pago del rescate en el caso del secuestro de Miguel Ignacio Echeverría -capturado por terroristas el 10 de enero de 1983 y liberado una semana después-, hijo de uno de los dueños de la empresa Patricio Echeverría.

La Dirección General de la Policía ocultó ayer los hechos, como es habitual en este tipo de sucesos. Fuentes policiales oficiosas informaron, no obstante, que se tiene la impresión de que los ejecutores de esta acción son los miembros del mismo comando que el pasado 13 de diciembre tiroteó al director de una sucursal bancaria de Madrid, al que pretendían secuestrar para exigirle también el pago del impuesto revolucionario.

Bombas en Barcelona

Por otra parte, cinco miembros de los GRAPO, tres hombres y dos mujeres, conocidos policialmente como el comando Barcelona, colocaron ayer dos bombas de gran potencia en la sede de Auto-Juncosa, concesionario oficial en Barcelona de la empresa alemana Mercedes Benz.

Los artificieros de la Policía Nacional (TEDAX) lograron desactivar los dos paquetes antes de que estallaran, informa desde Barcelona Albert Montagut.

La acción policial fue inmediata, porque el empleado del local se zafó por tres veces de los terroristas, a pesar de que éstos le amenazaron con armas de fuego, y logró dar la alarma a la comisaría policial del distrito.

A las 12.15 horas, una de las tres personas que habían entrado en el local se dirigió a Joaquim Mas, un joven de 25 años de edad, empleado-vendedor de Auto-Juncosa, y le dijo escuetamente: "Somos de los GRAPO, no oponga resistencia alguna y no le pasará nada".

La mujer que pronunció esas palabras fue identificada como María Teresa de Jesús González Rodríguez, una de las grapo más buscada por la policía y cerebro del comando Barcelona.

Las otras dos personas que la acompañaban eran María Dolores Romero Rodríguez, cuñada del histórico Juan Martín Luna, muerto hace dos años en Barcelona en un tiroteo con la policía, y Sebastián Rodríguez Veloso.

La policía no pudo conocer la identidad de los otros don miembros del comando, que esperaban en la calle.