Ballesteros y Martorell sólo trataron la disolución de ETApm VII, según un ex alto cargo

Los comisarios Manuel Ballesteros, ex jefe del Mando único para la Lucha Contraterrorista, y Joaquín de Domingo Martorell, ex jefe de la Brigada Central de Información, nunca fueron comisionados por ningún Gobierno para entablar negociaciones con ETA Militar, en contra de lo que ha asegurado esta organización, aunque sí participaron en los contactos previos que condujeron a la autodisolución de la VII Asamblea de ETApm, cuyos principales dirigentes regresaron en los últimos dos años a España acogidos a la vía de la reinserción social.Esta afirmación fue hecha ayer por un ex alto funcionario del equipo del Ministerio del Interior que dirigía Juan José Rosón, al que pertenecían, como máximos responsables policiales antiterroristas, estos dos comisarios. Un actual alto cargo del departamento corroboró esta información.

Ambos coincidieron al manifestar que, en caso de que se hubiera entablado algún contacto entre estos dos policías y ETAm, "lo sería siempre a título particular y nunca en nombre de un Gobierno de España".

No obstante, recientemente otro alto cargo de este departamento reconoció que habían sido comisionados dos policías para sondear a la organización, aunque en ningún momento dijo que se trataba de Ballesteros y Martorell. Este sondeo se realizó poco tiempo después del anuncio gubernamental de negociar la paz con ETA mediante la entrega de las armas.

Ballesteros, consultado por este periódico, ni confirmó ni desmintió las informaciones, "ya que no estoy autorizado para hacer declaraciones". Fuentes policiales señalaron, en cambio, que "un comisario como Ballesteros, por el cargo que ostentaba, sí ha podido tener contactos con ETAm, pero siempre dentro de la estrategia policial".

Estos dos comisarios, separados actualmente de la investigación antiterrorista, se encuentran destinados en diferentes departamentos policiales: Ballesteros, en la Comisaría General de Documentación, donde ejerce como jefe de personal; y Martorell, en la Comisaría General de Policía Judicial, como responsable de la Brigada del Banco de España (falsificaciones).

En cuanto al "comandante Rubio, de la Policía Nacional", citado también por ETA, las fuentes policiales consultadas dijeron que se trata de Miguel Rubio Rubio, ex comisario provincial de Pamplona. Al igual que Ballesteros y Martorell, estas fuentes indicaron que "nunca fue comisionado ni siquiera actuó como emisario del Gobierno". Rubio, destinado hoy en la Jefatura Superior de Policía de Valencia, "es todo lo contrario a un negociador", añadieron las citadas fuentes. Este comisario fue el único paisano que acompañó a los efectivos de la Policía Nacional que invadieron el ruedo de la plaza de toros de Pamplona el 8 de julio de 1978, a raíz de lo cual se produjeron grandes disturbios, en los que murió una persona y resultaron heridas de bala más de 20.