Prohibida la residencia en Bretaña de vascos vinculados a ETA

Los refugiados vascos vinculados a ETA no podrán residir en el departamento francés de Bretaña, según una orden emitida por la Administración de ese país. Esta disposición obligará a abandonar Bretaña en los próximos días a un total de 11 refugiados vascos instalados recientemente en esa región.

La Administración francesa trata de evitar que se establezcan contactos permanentes entre miembros de ETA y los nacionalistas radicales bretones. En las últimas semanas un número indeterminado de refugiados ha solicitado permiso de residencia en departamentos alejados del Gran Suroeste, región que engloba al País Vasco-francés, en cumplimiento de una orden gubernamental hecha pública el 26 de marzo último.

Dicha orden establecía que "los españoles de origen vasco, demandantes del estatuto de refugiado, no serán autorizados a residir en los nueve departamentos del Gran Suroeste, donde su presencia es susceptible de alterar el orden público". La abogada Christiane Fandó ha declarado que el Ministerio del Interior se valió de los atentados de los GAL para justificar las nuevas medidas y conseguir que los refugiados tuviesen que vivir en la clandestinidad, dejando así la vía abierta para la expulsión o extradición de los que no tuvieran regularizada su situación.