Fuentes judiciales descartan negligencia médica en la asistencia al doctor Malo

Fuentes del Juzgado de Instrucción número 3, encargado del caso seguido por el asesinato del doctor Juan Carlos Malo, ocurrido en Madrid el 22 de septiembre, señalaron ayer que ha quedado prácticamente descartada la negligencia médica en la atención prestada al herido después de ser apuñalado. Estas afirmaciones se producían después de que declararan ayer ante el juez los médicos del Hospital Clínico que atendieron al doctor, herido mortalmente en la glorieta de Gabriel Miró.Ayer prestaron declaración ante el titular del mencionado juzgado, Joaquín Navarro, los doctores del hospital Clínico San Carlos, Gil Aguado, encargado del departamento de cirujía cardiaca; Ferreiro Zorita, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos, y Álvarez Berceruelo, del departamento cardiaco.

El doctor Juan Carlos Malo fue intervenido el pasado 22 de septiembre por el cirujano y traumatólogo, Fernando de la Torriente, -que prestó declaración en el juzgado el pasado sábado-, quien apreció una herida con entrada y salida en el ventrículo izquierdo del corazón que, según declaró aquél, salvo en contadas ocasiones, es mortal de necesidad.

A pesar de ello, la intervención quirúrgica, según fuentes judiciales, se realizó con éxito. Cuando se encontraba en la Unidad de Cuidados Intensivos, las pulsaciones del doctor Malo bajaron de 80 a 60 y se le colocó un marcapasos, pero la situación clínica se agravó por falta de riego sanguineo en el cerebro. El equipo médico, siempre según la misma fuente, judicial, trató de reanimar al enfermo y se le aplicaron masajes al corazón a vida o muerte.

El magistrado Joaquín Navarro ordenó, a mediados del mes de octubre, la apertura de una investigación judicial sobre la atención sanitaria que se prestó a Malo en el hospital puesto que "existían indicios de que pudo producirse alguna actuación irregular".

Un posible retraso en la asistencia posoperatoria a Malo y el que no fuera avisado el cardiólogo de guardia del citado centro sanitario eran dos de los puntos oscuros del caso.

El cirujano que intervino al médico aseguró que no creyó necesario avisar al cardiólogo de guardia. Tras la operación se produjo una fuerte discusión en la puerta del quirófano entre los cirujanos que realizaron la operación y un grupo de médicos amigos del paciente, a causa de si el paciente debía pasar a la Unidad de Reanimación del departamento de traumatología o a la Unidad de Cuidados Intensivos del departamento de Cardiología como sostenían los médicos amigos de Malo.

Tras las declaraciones de los doctores, el sumario, en lo que a este punto respecta, puede quedar archivado por ausencia de negligencia médica, según declararon fuentes del juzgado número 3. "únicamente", precisaron dichas fuentes, "persiste como duda el hecho de que no se avisara al cardiólogo durante la operación".

Mañana prestarán declaración ante el mismo juzgado el ex director del hospital Clínico, José Fereres, y el portero del restaurante donde cenó el doctor poco antes de ser asesinado. Fuentes del juzgado precisaron también que de la investigación judicial está descartado otro móvil del crimen que no fuera el robo.