40 refugiados solicitan al Ejecutivo vasco que gestione su 'vuelta a casa'

Un total de 40 refugiados vascos residentes en países de Europa y Latinoamérica han expresado a miembros del Gobierno vasco su deseo de acogerse a las vías de reinserción social anunciadas por la Administración española, lo que les permitirá, una vez resueltos sus casos ante la justicia o la policía, poder regresar a Euskadi. Desde el pasado 30 de julio el Ministerio del Interior posee una lista de 11-0 de estas personas, facilitada por representantes del Gobierno vasco, sobre cuyas identidades guarda absoluta discreción. Además de esta lista de 20 personas y de otra relación, también de 20 personas, que aún no ha sido entregada a las autoridades de Madrid, es muy, posible, en opinión de fuentes próximas a esta institución, que en las próximas semanas el Gobierno de Vitoria facilite una relación de entre 10 y 12 presos dispuestos a abandonar la lucha armada y las organizaciones que la sustentan, -"las dos ramas de ETA y los Comandos Autónomos Anticapitalistas", para lo cual firmarán probablemente el mismo documento que el pasado mes de abril difundieron los 43 reclusos que solicitaron el indulto.

Teléfonos de información

Paralelamente a estas negociaciones del Gobierno vasco, que realiza un papel de gestor ante los ministerios de Justicia e Interior, la Administración española ha facilitado dos números de teléfonos de Madrid (410 29 43 y 419 39 68), además de los apartados de correos 51024 y 51027 también de la capital, para que a ellos puedan dirigirse, en demanda de información, todos aquellos refugiados que deseen regresar a Euskadi. Un alto cargo del Ministerio del Interior manifestó a este periódico que se han recibido bastantes llamadas desde que se puso en marcha este sistema, concretamente desde el pasado 5 de julio. Anunció que ya se habían resuelto algunos casos, concretamente de miembros de ETA que no tenían pendiente ningún tipo de requisitoria, tanto policíal como judicial. Este alto cargo no quiso revelar nombres por razones de "discreción, ya que la organización ha amenazado de muerte a todos aquellos militantes que quieran regresar al País Vasco utilizando esta vía".