Un ayuntamiento expedienta a Hidroeléctrica por no facilitar información sobre sus abonados

El Ayuntamiento, de Las Torres de Cotillas (Murcia) ha iniciado un expediente sancionador administrativo contra Hidroelectrica Española por presunto fraude fiscal, al oponerse la compañía a facilitar información a la corporación municipal sobre el censo de abonados al servicio y los balances de facturación, con lo que el ayuntamiento carece de medios de control para saber si la compañía ingresa en las arcas municipales el importe total de lo que recauda a los usuarios por la denominada popularmente tasa de palomilla.

Desde 1976, año en que por real decreto se establece la tasa municipal en el 1,5% en concepto de utilización de suelo urbano para el tendido eléctrico (tasa de palomilla), las empresas eléctricas son las encargadas de recaudar este impuesto a los abonados, cargando en los recibos el 1,5% para a su vez ingresarlo en las arcas municipales. Sin embargo, los ayuntamientos carecen de medios para controlar si el dinero que les ingresan las compañías eléctricas se corresponde realmente con el que han recaudado a los usuarios. La corporación municipal de Las Torres de Cotillas ha intentado que Hidroeléctrica Española le facilite el censo de personas dadas de alta en el servicio y la facturación anual, pero la compañía se ha negado amparándose en el secreto comercial, "figura que yo desconozco", afirma Diego de Ramón, abogado asesor del ayuntamiento, "pues ese supuesto secreto no está contemplado en ningún código".

Ante esta falta de colaboración de Hidroeléctrica, el ayuntamiento ha iniciado el expediente sancionador, que puede finalizar con una multa para la compañía de incluso el doble de lo defraudado.

Estimaciones diferentes

Según el letrado municipal, en 1983 Hidroeléctrica ingresó en las arcas municipales 1.751.898 pesetas por la tasa de palomilla, cuando, según cálculos estimativos, la suma debía haber superado probablemente los tres millones. También se presume en este ayuntamiento que las lecturas de los contadores no se corresponden con lo facturado en los recibos. En estos momentos, el teniente de alcalde de Las Torres de Cotillas, José Antonio Carrillo, técnico de electricidad, está realizando un amplio estudio para intentar aclarar estas presuntas irregularidades. Por otra parte, la corporación municipal de Las Torres de Cotillas estudia la posibilidad de informar a la Consejería de Industria del caso para que inicie otro expediente a Hidroeléctrica por igual motivo. También va a solicitar la intervención judicial en el examen y control del centro de proceso de datos de la compañía eléctrica, así como de sus libros, a fin de conocer el censo de abonados y la facturación de la compañía. En el caso de que se detectase el presunto fraude fiscal, la corporación pondrá los hechos en conocimiento del fiscal jefe de la Audiencia de Murcia para la ejecución de las acciones penales correspondientes. Por último, también se está estudiando la posibilidad de poner los hechos en conocimiento del delegado del Gobierno en la región para que intervenga caso de que Hidroeléctrica decidiese cortar el servicio público de alumbrado.

Hidroeléctrica ha presentado factura a Las Torres de Costillas por un importe de 27 millones de pesetas, que corresponden a cuatro o cinco años de servicio, pero la corporación municipal se niega a satisfacer esa cantidad si la compañía no le presenta una liquidación y permite la comprobación de la misma.

Como precedente existe el caso de cinco ayuntamientos madrileños -los de Getafe, Leganés, Fuenlabrada, Alcorcón y Parla- que requirieron a Iberduero para que les presentase el censo de altas y facturación. La compañía eléctrica tuvo que dar a los ayuntamientos citados un total de 571 millones de pesetas.