Los nadadores olímpicos, en los campeonatos de España que comienzan hoy en Las Palmas

Con los últimos ecos de los Juegos Olímpicos aún presentes, se inician esta mañana los campeonatos de España de natación en piscina de 50 metros en las instalaciones del Club Natación Metropole, de Las Palmas de Gran Canaria, que cumple su medio siglo de existencia. Trescientos setenta y seis nadadores, 202 hombres y 174 mujeres, pertenecientes a 68 clubes, se han dado cita en la isla. Están presentes todos los olímpicos, excepto David López Zubero, que, tras su fracaso en Los Angeles, se ha retirado definitivamente. A últimas horas del martes llegaron Rafael Escalas, en plena luna de miel, pues se casó el día 11 en Los Angeles, acompañado de su esposa, Jennifer, dispuesto a "por lo menos, alcanzar una buena puntuación para mi club, el Montjuïc", y lamentando su error en los 1.500 metros libres, que le impidió entrar en la final olímpica.

Ricardo Aldabe, el mejor clasificado en los Juegos, con su séptima plaza en los 200 metros espalda y dos récords nacionales en los 100, apareció en Canarias tras unos días de descanso en su Pamplona natal. Los demás, Kimbo Vallejo, Miralpeix, Juan Enrique Escalas, Enrique Romero, Harri Garmendia, junto con el preparador de la selección nacional, Fernando Navarro, llegaron directamente desde Los Angeles, con escala en Madrid.Esta presencia de los nadadores olímpicos da a los campeonatos cierto interés y, precisamente, la proximidad de fechas y la euforia por los nueve récords nacionales batidos en la McDonald's californiana permiten augurar marcas de cierto interés. Canoe y Montjuïc son los favoritos para el título masculino por equipos, en tanto que en categoría femenina los candidatos son el San Andreu, que lleva 15 días concentrado en Las Palmas, y el Gimnasio Madrid. El club anfitrión, el Metropole, en otro tiempo luchador por la primera posición, atraviesa ahora un bache que le obliga a renunciar a sus viejas aspiraciones. De hecho, San Andreu y Canoe son los equipos que mayor número de participantes aportan, con 23 nadadores cada uno.

Los campeonatos de España constituyen en esta oportunidad el final de una temporada cuyo balance no podrá reputarse de satisfactorio si analizamos las pruebas punteras, al margen de los Juegos, e incluso valorando esta competición, es decir, Ocho Naciones y campeonatos de Europa juniors, en los que el papel español ha perdido cotización.

Existía malestar entre los clubes porque, a menos de 24 horas del inicio de la competición, se desconocían los horarios de la misma. El Metropole culpaba de ello a Televisión Española, a cuya programación debía supeditar el desarrollo de las pruebas del sábado y el domingo. Finalmente, se acordó que las sesiones matinales empiecen a las 11.00 y las vespertinas a las 18.00 (hora, peninsular en ambos casos).

Al término de las pruebas, se iniciará una renovación importante en la natación española, con la puesta en funcionamiento del centro de alto rendimiento de Madrid, dirigido por Fernando Navarro, y una nueva estrategia en el centro de perfeccionamiento de Cerrado. de Calderón, de Málaga, con Fernando Tejero al frente. Dos fórmulas para que los mundiales de 1986, en Madrid, puedan dar una mejor imagen de la natación española.

Cervera intento cruzar el canal de la Mancha

A Jordi Cervera el fracaso de la natación española en los Juegos Olímpicos le importa muy poco. Sin embargo, él lleva más de un año pensando en atravesar el canal de la Mancha y conseguir una particular medalla de oro. "Lo que ha sucedido en Los Ángeles pertenece a otra federación; si atravieso el canal, será como conseguir una medalla", manifestó a este diario el nadador catalán, que hoy viaja a Forkestone (Inglaterra), desde donde intentará a partir del próxi mo día 19 atravesar el canal de la Mancha, según informa Dagoberto Escorcia.La aventura de Jordi Cervera es comparable a la escalada de una montaña. Durante muchos meses, el nadador tiene que afrontar una serie de duros entrenamientos y aclimatarse a la temperatura que encontrará en las aguas del canal. Para los alpinistas, la altura representa un serio problema. Para Cervera, "la dificultad más grande que ofrece el canal son los 17 o 18 grados de temperatura del agua".

Desde el año pasado, Jordi Cervera, que se quedó a muy poco de lanzarse a las frías aguas del canal, mantiene un rígido plan de entrenamiento. "Nado en la piscina durante tres veces al día y los fines de semana en el mar durante cuatro o seis horas".

El récord de tiempo en la travesía del canal está en ocho horas y media, pero Cervera se contentaría con hacerlo en nueve horas. "Son 33 kilómetros y los últimos nadadores que lo han atravesado han empleado 10 horas".

Jordi Cervera tendrá cinco días para intentar atravesar el canal, a partir del día 19. "Si puedo intentarlo el primer día, no dejaré pasar la ocasión. Yo me siento en condiciones y en ningún momento se me pasa por la cabeza que se vayan a repetir las malas condiciones del año pasado". Él no niega que sea una aventura sacrificada.

Según sus presupuestos, la travesía cuesta medio millón de pese tas. Recibe algunas ayudas de la Generalitat, del Ayuntamiento de Reus y de la Diputación de Tarragona, pero estas pequeñas colabo raciones no le cubren todos los gastos. O sea, que, en realidad, le cuesta dinero.