El equipo español no irá como tal a los 'juegos alternativos' de Moscú

Mientras el presidente del Consejo Superior de Deportes, Romá Cuyás, afirmaba que el equipo español no irá como tal a los juegos alternativos de Moscú, aunque dejaba abierta la posibilidad de que sí lo hiciese algún deportista invitado de forma individual, el atleta José Manuel Abascal se constituyó en el principal protagonista al regreso de la delegación olímpica, junto a los regatistas Luis Doreste y Roberto Molina, que también evidenciaban la lógica alegría por las medallas logradas. Sólo faltaban José Luis González, Jordi Llopart y, Domingo Ramón, que regresaron horas antes en otro vuelo. Abascal debía haber regresado igualmente por la mañana, pero... ¿cómo iba a faltar el gran campeón de los Juegos en el recibimiento? Entre todos le convencieran de que tirara su primer billete y volviera más tarde. Pero muchos de los olímpicos no pensaban en el recibimiento que iba a tener Abascal, sino en que así podían tener su firma en su Libro de los Juegos Olímpicos, con todas las páginas en blanco y en el que los deportistas se rubricaban autógrafos unos a otros en el largo viaje en avión.

Con la expedición española venían el presidente del Consejo Superior de Deportes, Romà Cuyàs, y el del Comité Olímpico Español, Alfonso de Borbón, que posaron juntos para los fotógrafos. Cuyàs dijo que el balance de la actuación española en Los Ángeles es parecido al de los Juegos de Moscú. "Quizá esperábamos un poco más por las evaluaciones que habían hecho las distintas federaciones de su presencia, pero creo que es un resultado suficientemente satisfactorio". El presidente del CSD declaró que los llamados juegos olímpicos alternativos, que empezarán el día 17 en Moscú, con la presencia de los países de la órbita soviética, salvo Rumanía, "no tendrán éxito". "Serán grandes mítines, unas competiciones interesantes, pero el carisma y la difusión de los Juegos Olímpicos son insustituibles. Quizá puedan servir para los frustrados deportistas del Este". "Como tal equipo, el español no irá a estos Juegos", subrayó Cuyás. "Si algún deportista es invitado y su federación le manda, bien. Sería como un mítin al que los atletas irían de modo individual".Los deportistas tuvieron su firma, pero sus paisanos casi se lo comen. Dos grandes banderas de Cantabria, su familia y varios amigos le esperaban a la salida del control de aduanas. Abrazos, llantos y euforia desbordante le envolvieron casi tanto como una de las banderas, en la que se embutió como un caballero español del siglo XVIII en su capa. "Estaba en mi mejor momento, tras la enfermedad que tuve, que me apartó dos meses de mis entrenamientos y competiciones", declaró Abascal, al que casi no se le veía la cara entre la nube de grabadores y cámaras fotográficas que tenía encima. "Yo creo que los árbitros actuaron con legalidad en los Juegos, aunque siempre se tira hacia los deportistas del país en el que se celebran las competiciones, como sucedió en Moscú, como en Los Ángeles y como sucederá en otros sitios".

"Al subir al podio, pensé en toda mi familia, en mis amigos, en España y en mi tierra, en Santander", continuó. "La regularidad, el sacrificio, el esfuerzo y el trabajo han sido las claves de esta medalla. Si queremos tener grandes deportistas en el futuro, debemos empezar a educar a los niños des de jovencitos. En España estamos muy retrasados en este aspecto".

La "espina González"

"Al atletismo español le ha faltado una o dos medallas, pero ha sido cuestión de pura mala suerte puesto que Marín y alguno más han llegado prácticamente lesionados. Pero hay que destacar que hemos tenido diez atletas, entre los diez primeros".

"Claro que sigo teniendo clava da la espina de no haber ganado a José Luis González", añadió Abascal. "Para mí, sigue siendo uno de los mejores corredores del mundo, pero estas competiciones no se le dan bien; en fin, seguirá compitiendo y haciendo buenas marcas". Probablemente, se volverá a enfrentar, con José Luis González dentro de unos días en la reunión internacional de Colonia. El atleta cántabro participará también el día 22, después de unas vacaciones en Santander, en un mítin en Zurich, donde intentará batir el récord del mundo, junto con otros atletas de talla mundial, y luego irá a Coblenza y Rieti. "Quizá suba un poco mi cotización en los mítines internacionales, pero no creo que demasiado, porque evidentamente nadie va a ellos gratis", concluyó.

Una de las decepciones españolas en Los Ángeles ha sido el equipo de balonmano. Se aspiraba a ganar medalla y ni siquiera se ha conseguido la clasificación para competir en el Mundial A. "No sé lo que pasó", dice Cecilio Alonso, uno de los jugadores más importantes. "Le he estado dando muchísimas vueltas y no he sacado nada. No hemos conseguido acabar bien el final de los partidos. Ha sido un cúmulo de nervios, de errores".

"Empezamos con los equipos más fuertes del campeonato", añade, bastante desencantado, "pero íbamos ganando a diez minutos del final y empezaba el desastre. No ha sido cuestión de preparación física porque aguantamos lo que sea. Lo que pasa es que aquí tenemos una Liga muy floja y no estamos acostumbrados a partidos de empate, a que se nos acerquen, después de ir ganando, y por eso nos hundimos. Buen equipo hay y tiene que haber solución. Éramos primeros o segundos de nuestro grupo con facilidad, pero eso había que demostrarlo".

La gimnasta rítmica Marta Bobo fue derrotada en Los Ángeles por el aire acondicionado, aunque ella no le da tanta importancia. "Tampoco he estado tan rnal", dice. "Puede que otras gimnastas superaran el problema del aire acondicionado, pero yo no. La verdad es que fue un factor en mi contra. No quiero justificarme con el aire acondicionado, pero contribuyó a que no salieran las cosas como yo esperaba".

"Esto es un bingo. Unas veces sale bien y otras mal. Una vez que has tenido un fallo, los jueces aprovechan y, aunque el resto de los ejercicios los hagas bien, van a tumbarte en las notas".

Dormir sentado

José Marín ofrecía un aspecto cansado, con muchas ojeras. Fue uno de los atletas españoles que acudieron en precarias condiciones de salud a Los Ángeles, a pesar de lo cual entró sexto en los 20 kilómetros marcha. "Ya dije antes de salir que tengo problemas. Llevo seis meses durmiendo sentado, sin poder tumbarme. Así no puedo continuar. Estos son problemas médicos que tienen que solucionarse. La federación de atletismo ha hecho todo lo posible, me han visitado los mejores especialistas españoles y no hay ninguna salida segura".