Málaga, principal frontera para la introducción del hachís en España
La instalación de sofisticados métodos de detección de droga en el control policial del puerto de Algeciras, principal punto de comunicación marítima con el continente africano, ha desviado la introducción del hachís al litoral malagueño, lo que ha convertido a la Costa del Sol en el principal punto de penetración en España de la droga blanda.La desviación de la ruta del hachís hacia la Costa del Sol es uno de los principales problemas con que se enfrenta la policía malagueña. Según el gobernador civil de Málaga, Plácido Conde, no existe una única organización que controle el paso de la droga, como ocurre con la Mafia, sino que son varios los traficantes existentes, que actúan de forma individual, siempre utilizando la Costa del Sol como lugar de tránsito hacia países europeos.
Los 168 kilómetros de playa y la proximidad del litoral con Marruecos facilitan el desembarco de la droga, que no siempre puede ser controlado por los servicios policiales y de la Guardia Civil. El desvío de Algeciras a Málaga, sin embargo, ha obligado a los traficantes a sustituir el habitual polvo de hachís por la resina de esta misma droga (un gramo de resina equivale a 10 gramos de polvo de hachís), de forma que la mercancía resulte menos abultada y más fácil de introducir. Un kilo de resina de hachís supone, en el mercado negro, ingresos estimados en los dos millones de pesetas.
La Costa del Sol es también uno de los lugares elegidos por los traficantes de heroína y cocaína, esta última procedente de Turquía y de Extremo Oriente. Al contrario que el hachís, que entra por la Costa del Sol, la heroína y la cocaína llegan generalmente por otros lugares, para ser puestas a la venta en la zona. El Gobierno Civil de Málaga, en colaboración con diferentes organismos administrativos relacionados con la salud, ha puesto en marcha un proyecto para la rehabilitación de los drogadictos, que en aquella provincia alcanzan cifras alarmantes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Tres usos alternativos y muy prácticos que ya se le está dando a las gafas inteligentes
Álvaro Fernández Heredia (Renfe): “Subir los pagos por retrasos en la alta velocidad nos costaría 125 millones y encarecería los billetes”
Kim Ju-ae, la hija de Kim Jong-un que aparece en las quinielas como su posible sucesora
Nazareth Castellanos, neurocientífica: “Hay que educar desde la escuela en técnicas de prevención de la ansiedad”
Lo más visto
- Víctor Bermúdez, profesor de Filosofía: “Hemos perdido el control del proceso educativo, lo que damos en clase es en gran medida un simulacro”
- Zelenski confirma que cualquier pacto con Rusia deberá ser ratificado en referéndum
- La revalorización de las pensiones queda en el aire por la negativa de la derecha a apoyar otras medidas sociales
- “Un jardín con casa, no una casa con jardín”: así es la premiada vivienda de 146 metros cuadrados que se camufla con la vegetación
- TVE se reivindica (con pulla) en su gran noche televisiva




























































