La llama olímpica llegó a Estados Unidos bajo la lluvia.
La llama olímpica llegó ayer a Nueva York, desde Grecia, bajo la lluvia. Juan Antonio Samaranch, presidente del Comité Olímpico Internacional, se refirió, en su recibimiento, al refranero español. Dijo que el mal tiempo, la lluvia, suele traer buenas noticias. Media hora más tarde Samaranch conocía la decisión oficial de la Unión Soviética de no participar en los Juegos de Los Ángeles. Bill Thorpe, nieto del legendario Sim Thorpe, y Gina Hemphil, nieta del no menos mítico Jesse Owens, fueron los primeros relevistas encargados de portar una antorcha que recorrerá 15.000 kilómetros, en 88 días, desde Nueva York a Los Angeles, por 33 estados norteamericanos.
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