La reaparición de las videntes

La naturópata Pilar Prades y la vidente parapsicóloga Belén Alarma, que obtuvieron un singular protagonismo durante los días inmediatos a la desaparición de Teresa Mestre, reaparecieron ayer en Cambrils, para animar con sus vaticinios y sus supuestos descubrimientos la reconstrucción del asesinato. Ambas aprovecharon la hora larga que duró la sesión judicial en el interior del apartamento de Mayayo para recobrar el protagonismo organizando una conferencia de prensa y situándose junto al presunto asesino cuando éste pasó ante los fotógrafos.Omitiendo prudentemente toda referencia á sus anteriores errores en sus predicciones, las videntes revelaron que Ángel Emilio Mayayo no actuó solo en el asesinato de María Teresa Mestre y que hay otras tres personas implicadas, una de las cuales es "un individuo muy importante y los otros dos son un chico joven muy corpulento y musculoso y una chica". Belén Alarma llegó a afirmar que está convencida de que antes de que finalice el mes de mayo el caso estará completamente resuelto.

Tras hablar unos minutos con Mayayo, Pilar Prades manifestó que el chico se había emocionado mucho al verla, repitiéndole que había actuado solo. La naturópata olvidó explicar su rocambolesco episodio cuando -pese a haber afirmado que concentrándose podría descubrir el paradero de la desaparecida- viajó en el coche de Mayayo buscando a Teresa Mestre por las calles de Tarragona, sin darse cuenta de que en el maletero del vehículo estaba el cadáver descuartizado de la mujer.