Los jornaleros en paro de Villamartín y Bornos se oponen a la aplicación del plan de empleo rural

La puesta en marcha de la primera experiencia piloto para la aplicación del Plan de Empleo Rural (PER), se ha suspendido de nuevo al negarse los parados de Villamartín a dirigirse al lugar de las obras. Al igual que hiciese con los de Bornos, el INEM ha iniciado expediente de suspensión del subsidio durante seis meses a los 160 trabajadores que estaban seleccionados.Esta puesta en marcha debía de haberse comenzado el día 4 de este mes con un presupuesto de 200 millones para, a través del IRYDA, realizar obras de canalización en el coto de Bornos. Se trataba de dos peonadas de 80 trabajadores, cada una perteneciente al censo de Bornos, cuyos contratos tienen una duración de 45 días. Los trabajadores se negaban a este contrato exigiendo otro de 15 días de duración para que alcanzase a más personas y pedían también la desaparición de las cargas familiares para que pudiesen trabajar las mujeres.

La dirección provincial del INEEM abrió expediente a los 160 trabajadores de Bornos, acudiendo después a los de Villamartín, que han respondido de idéntica manera. Tanto a unos como a otros les ha concedido un plazo de 72 horas para presentar recursos. En algunos de ellos se dice que la actuación de piquetes impidió dirigirse al puesto de trabajo.