Barajas sólo ha mejorado la iluminación de las pistas después de los graves accidentes del pasado diciembre
El ministro de Transportes, Turismo y Comunicaciones, Enrique Barón, comentó el pasado lunes al aterrizar en el aeropuerto madrileño de Barajas: "¡Qué bonito, esto parece una verbena!". A Barón le sorprendió la nueva iluminación de las pistas, según escucharon sus acompañantes. Esta iluminación es la principal innovación introducida en el aeropuerto después del accidente aéreo del día 7 de diciembre pasado, en el que perdieron la vida 93 personas.
Los colectivos profesionales de pilotos y controladores sostienen que "se deben hacer más cosas para mejorar la seguridad", pero la Administración insiste en que hay suficientes medidas y no se ejecutarán otras extraordinarias salvo que lo exigiera el resultado de la investigación sobre el choque del DC-9 de Aviaco con el 727 de Iberia, todavía sin concluir.Sin embargo, la Administración prepara un paquete de nuevas dotaciones para Barajas, que se iniciarán antes de final de año, con el fin de elevar la categoría del aeropuerto. El director del aeropuerto, Domingo Pérez Gómez, ha ratificado las declaraciones efectuadas el pasado día 1 de enero, en el sentido de que no se adoptarán nuevas medidas de seguridad, salvo que el resultado de la investigación así lo recomendara.
Según Domingo Pérez, en el aeropuerto "se están desarrollando instalaciones de balizajes y otras, para adecuarlo a la categoría 2, pero no pueden entrar en funcionamiento de manera aislada, sino que formarán un paquete de innovaciones cuando todas ellas se ajusten a la planificación adecuada". En este sentido precisé, que, "probablemente, funcionarán antes de acabar este año" y habrán supuesto una inversión económica de "unos 2.000 millones de pesetas".
Entre estas medidas las hay "muy diversas, desde nuevas señales a mejores dotaciones de los servicios de bomberos o sanitarios". Otra de las medidas será la instalación de barras luminosas rojas en el suelo, sobre la intersección de las pistas de rodaje con las pistas de aterrizaje y despegue. Algunos pilotos señalan que han observado que ya se han colocado algunas de estas barras; luminosas en intersecciones menos peligrosas. Dichos balizajes han sido reiteradamente reivindicados por los colectivos organizados de pilotos.
Manuel Jiménez Raya, vicepresidente del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA), señala que "tales barras exigen una mínima inversión económica y, sin embargo, evitarían las consecuencias trágicas de cualquier error, como pudo ocurrir en el accidente del 7 de diciembre". El piloto del aparato de Aviaco, de existir tales barras luminosas, hubiera podido advertir aquel día que abandonaba la pista de rodaje y hubiera podido abortar la maniobra, según muchos de sus compañeros.
Todos los testimonios recogidos por este periódico coinciden en que en los últimos tres meses "se han mejorado las luces de las pistas". Sin embargo, el director del aeropuerto, Domingo Pérez, asegura que "no se ha hecho nada especial, ni siquiera en la iluminación, a excepción de dar mayor intensidad a las lámparas, que admiten una gradación de cinco niveles, según lo exija la visibilidad, y también el repintado de señales horizontales, en el suelo, o el limpiado y mantenimiento periódico de pistas".
Estudios sobre control de superficie
El Ministerio de Transportes continúa los estudios sobre la conveniencia y rentabilidad de dotar a de Barajas de un radar de superficie, que, según algunos pilotos, facilitaría el control de las pistas en días de mucha niebla, si bien su principal función es la de dar fluidez al tráfico aéreo en situaciones de alta densidad del mismo, según la información oficial.Domingo Pérez recuerda que sólo en cuatro aeropuertos europeos se utiliza este radar, y no constantemente. El radar se utiliza, generalmente, cuando el tráfico se sitúa entre los 150.000 y los 180.000 movimientos de vuelo anuales, cifra de la que está "bastante alejado" el aeropuerto de la capital de España, con 120.00 al año. Como posible alternativa se estudia la instalación de unos nuevos sistemas de control de superficie basados en la energía calorífica o en la emisión de ondas magnéticas.
La Asociación Confederada Española de Controladores Aéreos (ACECA) admite que "no hay acuerdos internacionales sobre la efectividad del radar de superficie en condiciones climatológicas adversas". Mariano Hernández, presidente de esta asociación, precisa: "La dotación de medidas y señalizaciones de seguridad en el espacio físico del aeropuerto está dentro de las normas internacionales; el problema radica en que, dada la complejidad y diversidad que ya tiene el tráfico en este aeropuerto, debería estar incluido en la categoría 2, y con respecto a esta categoría, las medidas de control y seguridad si se quedan cortas".
El presidente de ACECA añade, en cuanto a las medidas de control de tránsito aéreo, que "no se ha realizado ningún cambio en los últimos meses y, al igual que ocurre con los sistemas de seguridad y orientación sobre las pistas, la situación es mejorable".
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