El apedreamiento de autobuses en Vigo, una vieja 'guerrilla' estudiantil
El 14 de octubre de 1.980 los estudiantes de Vigo salieron por primera vez a la calle para protestar por la falta de un bono-bus con precio reducido para la población escolar. Desde entonces y como una situación endémica se han venido repitiendo con gran frecuencia asaltos y destrozos a los autobuses de la empresa Vitrasa, siempre protagonizados por grupos de jóvenes entre los que se encuentran estudiantes y alborotadores.
Diez jóvenes, en su mayoría estudiantes de bachillerato, fueron detenidos en los últimos días en Vigo por la Policía Nacional y Municipal en relación con su presunta participación en el apedreamiento de autobuses de Vitrasa (Viguesa de Transportes, SA) en las tres últimas semanas. Los detenidos, tras ser puestos a disposición del juzgado, salieron en libertad sin fianza y sin cargos por el momento.En la actualidad el billete cuesta en Vigo 31 pesetas, pero en un reciente acuerdo entre la empresa concesionaria y el ayuntamiento se ha acordado una subida de cinco pesetas, pendiente de ratificación por parte de la Xunta de Galicia.
En contraprestación, la empresa se compromete a crear el bono-bus, para todos los usuarios que lo soliciten, al precio de 29 pesetas, con un mínimo de 50 billetes y una caducidad de dos meses. El ayuntamiento, por su parte, se compromete a subvencionar a la empresa con 18.400.004 pesetas anuales, como se viene haciendo en otras capitales donde existe el billete reducido. El subdirector de Vitrasa, Francisco Cifuentes, ha manifestado a EL PAIS que si un 60% de los usuarios se acoge al bono-bus, la subvención municipal no compensará a la empresa de las pérdidas.
Por otra parte, este acuerdo al que han llegado ayuntamiento y concesionaria parece no haber satisfecho a ningún sector de la vida ciudadana, y en tal sentido se han mostrado las asociaciones de vecinos y algunos portavoces de los estudiantes.
14 millones en 1983
En relación con los actos vandálicos contra los autobuses, Francisco Cifuentes ha precisado que los daños ocasionados a los mismos durante 1983 han superado los 14 millones de pesetas. En enero último han sido 62 los vehículos agredidos. La pasada semana un solo coche sufrió daños valorados en 600.000 pesetas, ya que quedó prácticamente reducido a un montón de chatarra. Se da la circunstancia de que este vehículo había sido reparado el día anterior y los arreglos costaron 50.000 pesetas. Tras las últimas agresiones, después del acuerdo con el ayuntamiento, la empresa ha mostrado su extrañeza dado que no han recibido ningún tipo de reivindicación por parte de los asaltantes, mientras que hasta hace poco siempre aparecían pintadas solicitando el bono-bus. Tras los últimos acontecimientos, en los que resultaron heridas dos pasajeras, se ha creado una comisión de seguimiento que trató durante el fin de semana pasado el tema con el gobernador civil.En la actualidad la empresa Vitrasa tiene en servicio 90 vehículos, de los cuales unos 20 pueden llevar protección, resultando imposible cubrir toda la flota. Francisco Cifuentes ha manifestado que la empresa está sufriendo una descapitalización debido al descenso de viajeros, cifrado en un 40% desde el año 1968 hasta agosto de 1983. El descenso de usuarios es producto del crecimiento del paro en la zona, la desaparición de la jornada partida para un 60% de los viajeros habituales, el aumento de vehículos particulares y, ajuicio de la empresa, la competencia ilegal de empresas interurbanas que realizan recorridos por la ciudad al no existir una estación de autobuses en Vigo.
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