Pobres subidas y presión sobre las eléctricas
En las reuniones de ayer los mercados de valores nacionales acusaron en mayor medida la presión que los vendedores ejercían sobre las acciones eléctricas, que resultaban absolutamente desprotegidas, frente a las pobres subidas que registraba el resto de los índices de Ios sectores que ofrecen una mayor ponderación sobre el índice general como consecuencia de una discreta retirada de la demanda, aparentemente justificada por la proximidad de un incierto fin de semana.En cualquier caso, los bancos mantuvieron sus trayectorias genéricas positivas, aunque en esta ocasión eran los signos de equilibrio los que predominaban con Bilbao, Hispano y Popular repitiendo, a pesar de que el saldo genérico comprador resultaba ayer bastante más importante que en las reuniones precedentes.
Los 71.399 títulos a la compra sin contrapartida vendedora, que ofrecía el mercado de valores madrileño como diferencia aparente entre las órdenes encontradas, se elevaron bastante por encima de las posiciones de días atrás. No obstante, es importante destacar que dentro de este volumen Banesto, no se sabe muy bien si porque se le volvió a ir la mano, ofrecía una diferencia positiva de casi 43.000 acciones. Junto a él, y en el capítulo de saldos compradores, aparecían Central, con 22.446 acciones, y Vizcaya, con poco más de 6.000 títulos. En el orden de las ventas, el ranking lo encabezaba Santander, con 9.000 títulos sin comprador, y le seguía Hispano, con algo más de 5.000 acciones. Con todo, fue el sector de alimentación y bebidas el que en alguna medida. acusó con mayor intensidad la falta de alicientes compradores. El Águila, uno de los valores punteros del grupo, y que además ha venido manteniendo un protagonismo destacado en los mercados de acciones nacionales en los últimos meses, perdía seis enteros en la bolsa madrileña, y terminaba cerrando a 124,5 con posiciones sin definir. El grupo de siderometalúrgicos consiguió registrar un nuevo y discreto avance, que viene a dar idea de que a pesar del voluntarismo, o a lo mejor sencillamente de los deseos de algunos inversores concretos, carece de la pujanza suficiente como para sumir un proceso de mejoras continuado.
En cualquier caso, lo que sí ponían de manifiesto los especialistas es que más de un valor industrial posiblemente debería ser objeto de contratación en la tienda de arte clásico de Concha Barrios, lo que a lo mejor representaba tener que trasladar estos corros al número 17 de la madrileña calle de Claudio Coello, pero que en cualquier caso ofrecería la inapreciable contrapartida del encanto personal de su propietaria. Bromas aparte, lo que sí es cierto es que mientras los valores continúen siendo los mismos que eran hace prácticamente diez años, y que sus problemas continúen siendo tan conocidos de los inversores como lo vienen siendo, es bastante difícil introducir elementos atípicos de incentivación en los mismos, por lo que incluso los especuladores más natos introducen elementos de cautela cuando se trata de actuar sobre estos valores. El grupo eléctrico no fue capaz ayer de hacer frente a las partidas vendedoras que se le presentaban, en general sus títulos más acreditados cedían posiciones estratégicas, posiblemente buscando evitar un desgaste innecesario ante lo que las reuniones próximas pueden exigir de ellos.
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