Jacqueline Onassis gana un pleito contra una modelo que suplantó su imagen

Jacqueline Onassis, ex esposa del presidente John F. Kennedy y viuda del multimillonario griego Aristóteles Onassis, ha ganado una querella judicial que interpuso contra la modelo Bárbara Reynolds "por violación de la vida privada y suplantación de su imagen en anuncios publicitarios".

La historia comenzó cuando el famoso modista francés Christian Dior quiso lanzar una nueva campaña de publicidad en EE UU y sus asesores crearon una escena de una fiesta de boda, bajo el lema Tan sólo un legendario asunto privado, en la que mezclaban la presencia de celebridades reales con la de la modelo Reynolds, de increíble similitud física con Jacqueline Onassis.

La publicidad fue difundida en varias publicaciones norteamericanas durante el pasado mes de noviembre. Duró hasta que la verdadera Jacqueline interpuso demanda judicial por considerar que el anuncio "violaba su privacidad". La semana pasada, el juez Edward Greenfíeld estimó en Nueva York que "nadie tiene derecho a pasar por quien no es". Ordenó la retirada de la publicidad y prohibió que la modelo Bárbara Reynolds continuara representando cualquier acto en el que pudiera ser confundida con Jacqueline (ex Kennedy) Onassis.

Para los expertos en publicidad, la sentencia supone un caso sin precedentes, que puede crear un peligroso antecedente. Pero el juez Greenfleld recordó que las leyes de derechos civiles prohíben en EE UU que alguien pueda utilizar, sin previa autorización escrita, "el nombre, la imagen o la foto" de otra persona.

Bárbara Reynolds, modelo y secretaria en el Congreso de Estados Unidos, no desespera. Piensa interponer recurso contra la sentencia en el Tribunal Supremo del Estado de Nueva York porque, al parecer, cuenta con otras ofertas publicitarias en Japón, y le gusta viajar.