Paul MacCartney

y su esposa, Linda, no ganan para sustos, por su afición a burlar las legislaciones de diversos países en materia de droga. Linda fue detenida ayer, a la llegada de ambos al aeropuerto de Londres, con un paquete de hachis. El día anterior el matrimonio compró en Barbados 100 dólares de marihuana para consumir durante las vacaciones. Precisamente tuvieron que salir antes de las citadas islas porque las autoridades de Barbados condenaron al ex Beatle a 14 días de cárcel o una multa de 105 dólares -unas 16.000 pesetas- por tenencia de droga blanda. Paul MacCartney, que tiene 41 años, estuvo más de una semana en la cárcel de Tokio, hace cuatro años, por llevar marihuana en su equipaje. Tanto entonces como ayer, prometió no volver a probar la droga, aunque pidió su despenalización, por considerarla menos perjudicial que el alcohol o la nicotina.