Fuerte temporal de lluvias en Granada, Málaga y Almería

El paseo marítimo de la localidad granadina de Torrenueva, en el municipio de Motril, ha resultado completamente destruido a consecuencia del fuerte temporal de Poniente que desde el pasado domingo asola las costas del sureste andaluz. Por otra parte, las lluvia caídas en la comarca de la baja Alpujarra han dejado aislada la población de Albuñol, al quedar cortada la carretera que sigue el curso de la rambla hasta La Rábita, donde las inundaciones de 1973 provocaron decenas de muertos y desaparecidos. Dos tercios, aproximadamente del paseo marítimo de Torrenueva han quedado destruidos por la acción de las olas, que ayer pegaban ya directamente contra los cimientos de varios edificios del pueblo, algunos de ellos de hasta siete y ocho plantas. La gravedad de la situación llevó ayer a los vecinos del anejo motrileño a manifestarse en demanda de soluciones.

Joven muerto en Ronda

Un joven de 18 años, Diego Baño Zambrana, fue encontrado ayer muerto en el cauce del arroyo de la Poma, en Ronda, donde cayó el pasado lunes por la mañana, in forma desde Málaga José Antonio Frías. El joven intentó cruzar el arroyo por un tronco atravsado sobre el cauce, pero a causa de las fuertes lluvias caídas la noche anterior, resbaló y cayó al agua, sien do arrastrado por la fuerte corriente. Parece seguro que al caer recibió un golpe en la cabeza y quedó inconsciente, por lo que no pudo salir del arroyo.Por otra parte, el temporal de agua y viento que azotó gran parte de la provincia de Almería en las pasadas 72 horas ha ocasionado varios desperfectos en la carretera de la costa, y ha quedado interrumpido el tráfico a la altura del colegio universitario, situado a unos cuatro kilómetros de Almería, informa Pedro M. de la Cruz.En las zonas de Levante y norte de la provincia, en la noche del domingo y la mañana del lunes se produjeron numerosos cortes en el suministro de fluido eléctrico, que afectaron, fundamentalmente, a los municipios de Mojácar, Garrucha, Turre, Los Gallardos, Antas y Bédar. También hubo deficiencias en el suministro de la capital, donde se produjeron derrumbamientos de cornisas y farolas e irregularidades en los semáforos.