Confirmado el encuentro entre Juan Pablo II y Alí Agca en la cárcel romana de Rebibbia
Juan Pablo II y Alí Agca, el terrorista turco que atentó contra su vida en la plaza de San Pedro el 13 de mayo de 1081, mantendrán un encuentro privado en la cárcel romana de Rebibbia el 27 de diciembre próximo, según confirmaron ayer fuentes italianas informadas.
En los mismos medios se mantiene que continúan aún las conversaciones entre el Vaticano y las autoridades judiciales para ultimar los detalles de la visita del Papa al mencionado penal, en el que tiene previsto también celebrar un acto litúrgico ante un millar de presos.Inmediatamente después de conocerse esta importante decisión del Papa, los observadores la interpretaron como una confirmación de que el terrorista turco, fanático islámico, desea convertirse al catolicismo.
Este último rumor se había difundido hace meses, cuando Alí Agca, que en el proceso afirmó que había intentado asesinar a Juan Pablo II porque era un "enemigo de la religión islámica", empezó inesperadamente a hacer elogios de la persona de Juan Pablo II. Hizo la distinción entre el Papa -"un hombre", dijo, "que lucha por los derechos humanos"- y el Vaticano, que, según él, intentaba asesinarle en la cárcel. Así lo escribió en una carta, en un inglés casi indescifrable, al secretario de Estado, cardenal Agostino Casaroli.
Pocos creyeron entonces en la sinceridad del agresor, que siempre había aparecido como un personaje ambiguo y que hace sólo unas semanas ha sido acusado de calumnias por el juez llario Martella, que investiga el atentado. Sobre todo, porque el sacerdote que le enseñó italiano en la cárcel, y que al parecer había sido el responsable directo de su conversión, el napolitano Mariano Santini, ha acabado también él en la cárcel, acusado de pertenecer a la Camorra. Aunque el Vaticano aún no ha confirmado oficialmente la noticia, se dan ya todos los detalles del encuentro.
Juan Pablo II se encontrará en la cárcel con Alí Agca, pero no junto con los otros presos, con quienes rezará y a quienes bendecirá para que puedan ganar el jubileo del Año Santo. Con quien atentó contra su vida el Papa se verá a puerta cerrada en una salita preparada para esta ocasión. Y ya se especula con las imponentes medidas de seguridad y las infinitas precauciones que se tomarán para que Alí Agca ofrezca en presencia del Papa las máximas garantías de seguridad. ¿En qué lengua hablarán Juan Pablo II y su agresor? Dicen que el Papa sabe algo de turco y que Alí Agca ha aprendido un poco de italiano. ¿Qué hará Alí Agca ante su víctima? ¿Habrá foto del encuentro? ¿Qué confesará el terrorista turco al Papa? Es un problema que ya se ha planteado el abogado del diplomático búlgaro Sergio Antonov, acusado por Alí Agca de haber sido el organizador del atentado de la plaza de San Pedro. Antonov está hoy en la misma cárcel en la que el Papa se encontrará con Alí Agca. Y su abogado, Giuseppe Consolo, ha afirmado que si el Papa se entrevista con Alí Agca, debería hacer lo mismo con Antonov, ya que, en caso contrario, una foto de Juan Pablo II abrazando al terrorista turco y acusador del diplomático puede plantear problemas en la defensa del búlgaro.
Precisamente, el juez Ilario Martella, que ha instruido el sumario sobre el atentado y sus supuestas conexiones internacionales, ha presentado días atrás sus conclusiones al fiscal de Roma para su calificación.
El gesto de Juan Pablo II parece demostrar que las garantías dadas por Alí Agca acerca de su conversión o, por lo menos, sobre un principio de arrepentimiento serio y de voluntad de abrazar la religión católica, deben haber sido consideradas muy en serio por el Vaticano.
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