Solicitadas siete penas de muerte para los militares iraníes acusados de comunistas

El juicio contra los supuestos dirigentes de la organización del Partido Comunista iraní en el seno de las fuerzas armadas de Irán (el capitán de navío Babram Afzali, ex almirante jefe de la Marina; dos coroneles, siete tenientes coroneles y un civil) finalizó el lunes en Teherán con la petición de siete penas de muerte para los juzgados, a los que el fiscal general de la República Islámica para las fuerzas armadas imputa pertenencia a la organización secreta comunista Sazeman Nezami Hezbé Tudeh, así como cargos de espionaje a favor de la Unión Soviética.

Fuentes comunistas iraníes confirmaron a EL PAIS que los juzgados en Teherán son, además del almirante Bahram Afzali, los coroneles Bijan Kabiri y Hoshang Atarian; los tenientes coroneles Rahim Sadegzadeh, Sayed Mahmud Mofidi, Hassan Azarfar, Mohamad Amin Mogadam, Abolgasem Afrai, Rahim Shanis y Jeirolah Iraninejad.De acuerdo con la información suministrada por la agencia France Presse, no se sabe a quiénes de los once juzgados han correspondido las penas. Afzali negó haber pasado al Partido Tudeh informaciones de índole militar aprovechables por el espionaje, ni tampoco orientadas al derrocamiento del régimen islámico.

El Partido Tudeh permaneció en la legalidad hasta el pasado mes de febrero, en que sus dirigentes fueron detenidos. El partido fue disuelto el pasado mes de mayo. Doscientos militares más permanecen encarcelados. El número de civiles arrestados por pertenencia al Tudeh puede ser de, 5.000. Ayer lo fueron las esposas de los dirigentes comunistas Eshan Tabari y Freidun Misani, que protestaban ante la falta de noticias sobre la suerte de sus esposos.

El proceso, que comenzó el pasado 6 de diciembre, a puerta cerrada, ha registrado una serie de irregularidades, como la falta de especificación, por parte de las autoridades, del número real de los juzgados. La cifra correcta parece ser la de once.

A ello se suma el hecho de que ,testimoniaron en contra de los encausados dos de los principales dirigentes del Tudeh, Nuredin Kianuri, de 78 años, hasta ahora secretario general, y Mohamad Mehdi Partovi, presentado como "'responsable de la organización comunista secreta".

Según fuentes comunistas iraníes, no existe un solo caso como este en la historia de los partidos comunistas, en el cual un secretario general delata con tanta rotundidad a sus supuestos correligionarios. Ello les lleva a asegurar que está siendo tratado con drogas neurolépticas, según un equipo médico que observó los síntomas que Kianuri presentaba en sus confesiones autoacusatorias ante la televisión iraní, la pasada primavera.

Las fuentes mencionadas aseguran también que los dirigentes comunistas detenidos han sido interrogados por el general Fardust, uno de los responsables de la policía política del sha.

Por su parte, el Partido Tudeh de Irán ha nombrado un nuevo comité central, con secciones en el interior y en el exterior del país.