Importantes realizaciones de beneficios y expectativas en la Bolsa de Nueva York
La pasada semana se caracterizó en la Bolsa de Nueva York por un importante proceso de realización de beneficios, consecuencia directa del incremento de la inestabilidad política internacional, derivada de los conflictos bélicos existentes en Irán, Líbano y Granada. Este proceso ha dado lugar a un incremento en los niveles de liquidez de los principales inversores institucionales que es contemplado con bastante satisfacción por los especialistas bursátiles, que consideran que antes o después estos recursos serán nuevamente canalizados hacia el mercado de acciones.Para enunciar esta tesis se apoyan en el hecho de que los tipos de interés internos en Estados Unidos no presentan condiciones objetivas para observar un nuevo incremento. Esta posibilidad constituiría, según estas opiniones, que recoge Shearson American-Express en su resumen semanal, el desestímulo más serio para, la inversión en títulos de renta variable.
Sin embargo, los recientes acuerdos para refinanciar la deuda norteamericana han hecho callar por el momento las voces de los apologistas de nuevos incrementos en los tipos de interés.
Por todas estas razones, el índice Dow Jones, que agrupa a los principales valores industriales con cotización en Wall Street, se situó por encima del 1.220, lo que viene a representar, según algunos testimonios, una confirmación del nivel de solidez técnico de esta cota. Paralelamente se conoció, a través de un trabajo publicado en el Wall Street Journal, que los beneficios de las compañías norteamericanas han crecido a un ritmo del 29% en relación a los datos del ejercicio anterior. Este incremento denota la fuerte expansión que se ha producido en el sistema económico estadounidense, lo que puede constituir un aliciente para invertir en acciones.
No obstante, este mayor ritmo en el crecimiento económico puede terminar por representar un riesgo de crecimiento de la inflación, ampliamente controlada por la Administración Reagan en los dos últimos años. De producirse este fenómeno correría en paralelo un aumento en los tipos de interés que podría trastocar en última instancia los parámetros previstos de evolución económica positiva para el próximo año. No obstante, parece que la Federal Research (Reserva Federal) contempla con especial atención la evolución de las principales magnitudes económicas y no se halla dispuesta a consentir un fuerte nivel de crecimiento a cambio de incurrir en el peligro de desatar la inflación.
Precisamente las tensiones bélicas existentes han afianzado nuevamente el dólar en los mercados internacionales.
