El fiscal pide de 6 a 27 años de cárcel para los ultraderechistas que mataron a un joven e hirieron a dos más en el Retiro

La muerte de un joven y las heridas de otros dos como consecuencia de los golpes propinados por un grupo de ultraderechistas armados con palos y un bate de béisbol han sido calificadas por el fiscal de la Audiencia Provincial de Madrid como delitos de homicidio y lesiones, por lo que ha pedido penas entre los 6 y los 27 años de prisión para sus autores. La acusación particular ha calificado los mismos hechos como asesinato y lesiones, pues considera que los ultraderechistas actuaron con alevosía, y ha solicitado penas que oscilan entre los 26 y los 48 años de cárcel. La defensa de los presuntos agresores ha considerado, en el caso más grave, delito de imprudencia, y la pena máxima solicitada es de seis meses. El juicio se celebrará el próximo día 17.

Los procesados son Francisco Benjamín Pita da Veiga (sobrino del ex ministro de Marina), José Antonio y Ángel Luis Nieto, Miguel Cebrián, Emeterio Iglesias, Gabriel Rodríguez Medina, Eduardo Juan Limiñana y José Miguel Fernández Marín.Según el escrito de conclusiones provisionales del fiscal, al que ha tenido acceso EL PAÍS, el 13 de septiembre de 1979 todos los procesados y dos menores de edad penal se dieron cita para llevar a cabo lo que llamaban "acciones de hostigamiento". Sobre las 21.15 horas, armados con palos, cadenas y un bate de béisbol, se adentraron en el Retiro. Al ver acercarse a un grupo de personas, decidieron atacarles, para lo que se escondieron entre los arbustos del paseo de Coches.

Cuando dos de los jóvenes, Luis Francisco Canicio y Jesús Manuel Oyamburu, llegaban a la altura del grupo, salió uno de ellos, que atacó por la espalda a Canicio. Inmediatamente, los restantes miembros del grupo atacaron y golpearon a los dos, que ante lo imprevisto de la agresión quedaron en el suelo sin poder defenderse.

Animo de matar

José Luis Alcazo, que acompañado de una joven caminaba detrás de Canicio y Oyamburu, al ver que éstos eran atacados trató de defenderles. Logró sujetar el bate de béisbol que enarbolaba Limiñana, pero éste pidió ayuda y acudieron en su auxilio Rodríguez, Cebrián y Ángel Luis Nieto. Alcazo salió huyendo, pero fue alcanzado por los cuatro agresores, que le golpearon "con ánimo de quitarle la vida". Uno de los golpes fue tan contundente que le causó la muerte.

Oyamburu, semiinconsciente, pudo huir corriendo, a pesar de ser perseguido por algunos de los procesados. Canicio pudo alejarse del lugar al recuperar el conocimiento. Este último estuvo lesionado durante 135 días, y Oyamburu durante 90. Las penas solicitadas por el fiscal son: 27 años para Ángel Luis Nieto; 18 años y 6 meses para Limiñana, Rodríguez y Cebrián; 9 años para José Antonio Nieto, y 6 años y 6 meses para el resto.

La acusación particular ha añadido al relato del fiscal que Alcazo quedó inconsciente cuando estaba siendo golpeado y recibió el golpe mortal en presencia de todos los procesados, cuando permanecía sujeto.

Los acusadores solicitan 48 años para todos los procesados, excepto para los menores de 18 años, para los que piden 26 años y 6 meses.

La defensa ha señalado que la intención de los procesados era ahuyentar a los delincuentes y que se produjo una riña tumultuaria en el transcurso de la cual resultó muerto José Luis Alcazo.

El escrito de la defensa dice textualmente: "Esta acción noble y altruista de los jóvenes procesados llevaba en sí un grave riesgo, incluso flisico, para ellos".