El Real Madrid ha ofertado más entradas de las que el Santiago Bernabéu tiene establecidas oficialmente

Los partidos entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid casi siempre superan el aspecto estrictamente deportivo. El interés y la expectación que despiertan se viven de tal forma que se pone en juego algo más que los dos puntos. La primera batalla de encuentros de estas características es conseguir una entrada. Según cálculos efectuados, las localidades puestas a la venta causarán que el aforo del campo registre una entrada superior a la oficial. El palco del Santiago Bernabéu también se queda pequeño para las diferentes autoridades que desean presenciar el partido. Ministros, diputados, embajadores, altos cargos de la Administración, olvidan sus funciones diarias para intentar convertirse en un aficionado más o disfrutar del calor y el color de unos graderíos. La recaudación del encuentro puede alcanzar los 50 millones de pesetas y ya se ha confirmado la huelga de trabajadores fijos discontinuos para elpartido.

El campo del Santiago Bernabéu se queda pequeño para partidos de eternos rivales. Es posible que no se llegue a colocar el cartel de "No hay billetes". Luis de Carlos, presidente del Real Madrid, comentó que quizá queden algunas entra das de pie sin vender. Estas entradas ya no las quiere nadie. El público se resiste a comprar esta clase de localidades. El aficionado futbolístico se ha vuelto más cómodo. Todo el mundo desea entradas de asiento. Así, el pasado jueves, día en que por la tarde se pusieron las localidades a la venta, ya se agotaron las entradas de asiento. El presidente madridista contó, como detalle, que le han llegado solicitudes de encargo que fueron anuladas al instante cuando conocieron que sólamente se podían cumplir con localidades de pie. "La gente no mira ya la peseta", fue la conclusión de Luis de Carlos.Los dirigentes del Real Madrid han tenido serios problemas para cumplir todos los compromisos de solicitudes de entradas del partido de hoy. Las peñas madridistas han pedido en esta ocasión, un promedio de 60 a 80 localidades. Hasta el Real Madrid han llegado, solicitudes de entradas para este partido desde Bélgica y México.

Fuentes madridistas aseguraron que las entradas puestas a la venta para el partido de esta tarde fueron 40.000. Parece una cantidad demasiado elevada, ya que, si se suma a la de socios y abonados del club, supone un número total de 100.000 localidades para un Santiago Bernabéu que, después de su remodelación para el Mundial-82 redujo su aforo oficial a 85.000. Más de 15.000 localidades de diferencia es un número demasiado elevado para situarlas en el campo. Además, los dirigentes madridistas reconocieron que el club, a principio de temporada y para toda ella, proporcionó unos 3.000 pases a federativos, árbitros y a diferentes personas.

Hasta última hora se desconoce por parte del club madridista el número de autoridades que asistirán al partido de esta tarde. En buena parte de los casos su presencia no se confirma hasta horas antes del inicio del encuentro. Entre Ias autoridades que aseguraron ya su asistencia al partido figuran algunos ministros, el presidente del Congreso, Gregorio Peces Barba, socio madridista desde hace bastantes años, así como el presidentel de la Comunidad Autónoma de Madrid y el embajador de Marruecos en España. Los dirigentes madridistas han reservado de 50 a 60 localidades en el palco.

El Atlético de Madrid solicitó 2.000 entradas, divididas a partes iguales entre las de asiento y de pie. Vicente Calderón, presidente del Atlético de Madrid, no asistirá al partido por prescripción médica y decidió trasladarse estos días a la localidad valenciana de Gandía. El Real Madrid suele invitar a almorzar a los directivos del equipo con el que horas después se enfrenta en el Santiago Bernabéu. Este gesto no se practica con motivo de estos partidos de rivalidad.