Un lector que se borra

He sido lector de su diario desde el mismo día de su irrupción en la raquítica escena periodística española, y he sido ferviente- defensor de su editorial durante todo este tiempo, a pesar de haber sufrido informaciones inciertas personales, pero he decidido dejar de ser comprador y, por supuesto, lector de EL PAIS porque éste ha dejado de ser objetivo. EL PAIS ha pasado a ser lo que era el Arriba antes, un mero espejo de lo que piensa el Gobierno, y las personas que, como yo, hemos pensado socialista y vemos que esto es un despatismo ilustrado en versión siglo XX, no podemos por menosque sentirnos defraudados por ustedes que tanto, periodisticamente hablando, prometían, y se han quedado en el parto de los montes.

Es muy triste para mí llegar a este extremo, porque ahora me volveré a encontrar perdido, informativamente hablando, a semejanza de lo que ocurría, hace muchos, muchos años.

Se han apuntado ustedes al Moscoso, González, etcétera, y nos han dejado a nosotrós, quienes esperamos una información (lo de veraz sobra, porque según el concepto que ustedes tenían hace muchos años, toda información debía ser veraz, era algo inherente), huérfanos de información. ¿Tendremos que leer el Abc? ¡No, por favor! ¿Tendremos que leer Ya? ¡No, por favor! Tendremos que leer La Verdad y jodernos (otros tendrán que leer Las Provincias o El Norte de Castilla, es lo mismo). El caso es que tendremos que prescindir a la fuerza del único diario que hasta hace poco, unos meses, era representativo de la libertad de expresión, y que, ya digo, ha dejado de serlo. Sólo le falta a ese editorial tan bonito en todos los sentidos, y tan libre, poner "Vehículo inanimado del pensamiento gubernamental", así, todo el mundo sabría a qué atenerse y el que quisiera podría intoxicarse con su parcial información. Siempre publican cartas tibiamente contrarias a su periódico, y sé que ésta no se va a publicar, pero por lo menos me uno a la cantidad de gente que les habrá escrito con el mismo tema.

P.D. Han pasado ustedes de ser la joya del periodismo a ser la mierda./

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