El comité de Potasas de Navarra rechaza el plan de reconversión de la empresa
El comité de empresa de Potasas de Navarra (del que forman parte CC OO, UGT, USO y una candidatura de izquierda) ha rechazado unánimemente el plan de mina reducida presentado por el presiden te de esta industria, Francisco Conde, en el que se prevé la reconversión de la misma durante los dos próximos años con una reducción de plantilla que afectará a 568 personas. Los representantes de los trabajadores señalaron ayer en conferencia de prensa que este plan de emergencia pata Potasas no es una solución sino un proyecto de cierre dilatado de las instalaciones por lo que anunciaron movilizaciones en contra de la puesta en práctica del mismo.Según se especifica en el plan de reconversión propuesto por el presidente de Potasas, la concentración en mina y la reducción de la productividad bruta llevará consigo una disminución de plantilla que afectará a todos los centros de trabajo de la empresa. La aplicación de esta reducción de plantilla se llevará a cabo a lo largo de 1984 (436 trabajadores) y 1985 (132 personas). El plan señala, asimismo, que sin tener en cuenta las indemnizaciones al personal, la empresa se encontraría con una cuenta de resultados negativos de 6.723 millones de pesetas en 1984 -de los que 2.648 serían atribuibles a cargas financieras pendientes y 3.786 millones a amortizaciones- y de 5.835 millones del pesetas en 1985.
Para el comité de empresa de Potasas, este plan no es una iniciativa personal de la dirección sino que "obedece a una situación determinada" en la cual están metidas todas las altas jerarquías del Ministerio de Industria y del Instituto Nacional de Industria. Los representantes de los trabajadores reiteraron su absoluta seguridad en la viabilidad de la empresa que, en su opinión, cuenta con yacimientos suficientes para continuar la extracción al menos durante nueve años. En este sentido dijeron que, al margen de las explotaciones ya conocidas, existen unas reservas de 15 millones de toneladas de mineral en la zona situada entre Esparza y Subiza, lugar, donde precisamente, los trabajadores celebrarán mañana, sábado, una asamblea con el fin de definir la postura a adoptar.
El comité de empresa subrayó que el objetivo de las movilizaciones anunciadas en contra de la puesta en práctica del plan es conseguir el mantenimiento de los 1.860 puestos de trabajo existentes.
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