Miembros de la Guardia Civil tuvieron que cortar las cadenas de los ocupantes de la finca 'Las Penas' para desalojarlos
Los ocho jornaleros del Sindicato de Obreros del Campo (SOC) encarcelados por su encierro en el Ayuntamiento de El Coronil fueron recibidos ayer multitudinariamente en esta localidad, a la que regresaron a media tarde tras abandonar la prisión de Sevilla, una vez que un comité de solidaridad creado al efecto hizo entrega de la fianza exigida. El hecho más notable ayer en el campo andaluz fue el desalojo de la finca Las Penas, en Paterna del Campo (Huelva), ocupada por jornaleros del Movimiento Comunista (MC) y CC OO, para lo cual la Guardia Civil tuvo que cortar las cadenas con que se amarraron a las ventanas del cortijo. La Junta de Andalucía, por su parte, aprobó ayer el documento base de la ley de Reforma Agraria
Las 160.000 pesetas a que quedó reducida la fianza por la libertad provisional de los ocho jornaleros, una vez que el juez titular de Morón, recién regresado de las vacaciones, suavizó las exigencias del suplente, que pedía 100.000 pesetas por cada uno, fueron depositadas ayer a las once de la mañana en el propio juzgado. El dinero no fue entregado por el SOC, que se negaba a hacerlo tanto por una razón de principio como porque carece de fondos, sino por el comité de solidaridad Tierra y Libertad, formado a tal efecto.Hasta las seis de la tarde no se produjo la liberación. El retraso se achaca a trámites burocráticos imposibles de acelerar, si bien se supo que el telegrama de Morón que anunciaba que la fianza ya estaba depositada y que el juez disponía la puesta en libertad de los detenidos, llegó a Sevilla a las 13.20 horas. Los ocho jornaleros fueron recogidos a la puerta de la prisión provincial por varios compañeros e inmediatamente se dirigieron a su pueblo, El Coronil, donde les recibieron en triunfo 3.000 personas. Las huelgas de hambre finalizaron en el mismo momento en que ellos pisaban El Coronil.
Desalojo de 'Las Penas'
En Paterna del Campo, localidad situada en la provincia de Huelva, cerca del límite con Sevilla, el tacto de la Guardia Civil salvó una situación difícil. A las 10.30 de la mañana fuerzas de la comandancia de Huelva entraron en la finca para desalojar a los jornaleros del MC y CC OO que la ocupaban. 17 de ellos se encadenaron a los barrotes de las ventanas del cortijo. Previa consulta con los superiores, el teniente que mandaba la fuerza decidió cortar las cadenas. La Guardia Civil actuó con total corrección, pese a la tensión que por algunos momentos se detectaba en el ambiente.Una vez que les fueron retiradas las cadenas, lo que ocurrió a las 14.15 horas, los jornaleros no pudieron identificarse por no llevar la documentación encima. El teniente les ofreció que se fueran a sus casas, comieran tranquilamente y después se presentaran, por la tarde, en el cuartelillo de Escacena del Campo, para que allí fueran registrados sus nombres. Se negaron a ello y en consecuencia fueron transportados directamente al cuartelillo.
La marcha de CC OO cubrió ayer la distancia entre El Burgo y Ardales, mañana llegará a Campillo y pasado mañana a Antequera, donde habrá un acto multitudinario. Por su parte, el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía aprobó ayer el documento base de la ley de Reforma Agraria elaborado por la Consejería de Agricultura. Hasta el momento no ha trascendido ningún detalle de dicho borrador, aunque fuentes próximas al Ejecutivo autónomo indicaron a Efe que este proyecto colmará las aspiraciones de los andaluces porque tiene capacidad de ilusionar.
Se trata, según estas fuentes, de una propuesta que no se limita a plantear el problema desde una perspectiva agrícola, sino que se integra en la intención de modernizar la estructura productiva de Andalucía.
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