Promyslov y Tierno inauguran la Semana de Moscú con apelaciones a la paz

Con un discurso sobre la necesidad de recobrar el sentido histórico de las ciudades, como vehículo para las relaciones entre los pueblos y soporte para el trabajo por la paz, el alcalde de Madrid, Enrique Tierno, inauguró a las 13 horas de ayer en el Centro Cultural de la Villa la Semana de Moscú en la capital española. A las palabras de Tierno respondió el alcalde de Moscú, Vladimir Promyslov, con un parlamento en el que destacó el importante papel que han jugado las dos ciudades para la normalización de las relaciones entre ambos Estados desde 1974, fecha en la que una delegación del Ayuntamiento de Madrid visitó la capital de la URSS.

"A pesar de las diferencias entre nuestros sistemas políticos", explicó Promyslov, "nuestros pueblos tienen intereses comunes, como son la lucha por la paz y la seguridad internacional". Enrique Tierno disertó con su habitual estilo sobre "la recuperación del derecho transmunicipal", y aseguró que "cuanto mejor equipada está una ciudad, más sentimiento de paz florece en sus habitantes".Los dos alcaldes vestían traje de color gris, y expresaron el mismo convencimiento sobre la amistad y la similitud de intereses entre el pueblo de Moscú y el de Madrid. "La experiencia nos muestra", dijo Tierno, "múltiples símbolos del amor entre los dos pueblos".

Promyslov expresó durante el discurso que pronunció su satisfacción por el final feliz de los trabajos de la Conferencia para la Seguridad y Cooperación en Europa (CSCE), y deseó que "el espíritu de Madrid ayude a que mejoren las relaciones entre los Estados".

Desfile de Modas

Terminados los discursos, los dos alcaldes recorrieron la exposición Tecnología y artesanía de la URSS, que sobre una superficie de dos mil metros cuadrados ofrece una panorámica de la industria y del urbanismo de Moscú. "En la exposición", dijo el alcalde de Madrid, "podemos ver como un pueblo vive y trabaja en paz, siguiendo su propio camino".Los alcaldes presenciaron a continuación un desfile de modelos de alta costura soviética, que exhibieron tres esbeltas modelos moscovitas, y pudieron contemplar un simulacro de despegue de cohete espacial y diversas maquetas de naves espaciales y complejos urbanísticos.

Al final, la delegación soviética ofreció un ágape a los asistentes, que incluyó caviar recién traído de Moscú. Al acto asistieron el embajador de la URSS en Madrid, Yurl Dubinin, y varios miembros de las corporaciones de las dos capitales. Los concejales del Grupo Popular, como habían anunciado, no hicieron acto 'de presencia.