_
_
_
_
_

El Consejo de Administración del canal catalán demuestra en público sus divergencias

El Consejo de Administración de la Corporació Catalana de Radio i Televisió, empresa de capital público constituida por el Parlamento de Cataluña, compareció ayer ante los medios de comunicación por primera vez desde su constitución, el pasado mes de junio. En la rueda de prensa los miembros del consejo se enzarzaron en una discusión en la que, según opinión de la mayor parte de los consejeros, se reprodujeron públicamente las discusiones que habían dividido recientemente a los componentes del citado organismo rector de la empresa de televisión catalana. El futuro papel de este organismo rector pueda con ello notablemente indefinido.

La conferencia de prensa, que dirigió el presidente del consejo, Carles Sentís, se celebró en Barcelona en una pequeña sala de proyecciones de los actuales locales de Catalunya Ràdio, comprados por la Corporació después de que la agencia publicitaria que los ocupaba hiciera suspensión de pagos. El punto más importante de la controversia versó sobre el proceso de aprobación, el pasado jueves, de un comunicado en el que el consejo de administración manifestaba "su preocupación por el contenido del proyecto de ley Reguladora de los Terceros Canales (presentada por el Gobierno socialista), que afecta de forma importante al desarrollo del proyecto de Tercer Canal de televisión en Cataluña".Dicho texto fue sometido a votación, por primera vez en la corta historia del consejo de administración, y fue aprobado con nueve votos a favor, una ausencia, y tres en contra, los tres de consejeros socialistas. En la conferencia de prensa varios consejeros desarrollaron sus posiciones sobre el comunicado, como si se tratara de una explicación de voto, reproduciendo para. los periodistas las discusiones que anteriormente se habían desarrollado, en las reuniones. del organismo. Los consejeros socialistas explicaron que la propuesta inicial la presentó el director general de la Corporació, Pere Cuxart, que es también consejero, y no una comision ad hoc que se había constituida al efecto.

Aseguraro n asimismo que ellos eran partidarios de un texto que definiera positivamente la posición del consejo ante la necesidad de una televisión catalana, y no una posición negativa ante un proyecto de ley presentado en el Congreso de los Diputados y susceptible por tanto de recibir enmiendas y de ser rectificado.

Otros consejeros insistieron, en cambio, en que el proyecto era una amenaza muy seria al derecho de Cataluña a una televisión propia, y que era urgente una toma de posición de los consejeros ante este obstáculo. La discusión sobre el documento se trasladó, asimismo, a la cuestión de si TV3 debía poseer una red propia o debía ponerse de acuerdo con RTVE. Pere Cuxart y el consejero de Esquerra Republicana, Miquel Reniu, explicaron que entendían como obligada la creación de una red independiente, por cuanto el Parlamento de Cataluña ha aprobado un presupuesto en el que se incluye una partida para la creación de la red televisiva. Los restantes consejeros que intervinieron matizaron sus posiciones manifestando que era una cuestión todavía abierta y susceptible de negociación política, a excepción de alguna referencia por parte de los consejeros socialistas a la necesidad de que se utilice una sola red independiente de RTVE por parte de todas las cadenas de televisión que se vaya creando. El proyecto de Ley presentado por el Gobierno socialista contempla precisamente que la red de difusión seguirá en manos del Ente RTVE.

Al margen del debate, que ocupó la mayor parte de la rueda de prensa, varios consejeros manifestaron su satisfacción por la emisión experimental del día 10, de setiembre. Joaquim Ferrer afirmó que "los catalanes, habían esperado 30 años para ver lo que vieron el sábado, y que producía una gran satisfacción ver que la televisión catalana empieza a caminar". Miquel Reniu dijo: "Ja tenim televisió (ya tenemos televisión). Por eso es más grave que se haga el proyecto de ley de terceros canales, cuando vascos y catalanes tenemos ya televisión".

Un millón y medio de audiencia

Según Pere Cuxart la audiencia de esta emisión llegó a u n millón y medio de personas. El propio director general explico que no se había pedido salutaciones a las más altas magistraturas del Estado porque se consideró que una emisión de prueba como, la que se realizó "no merecía molestar a personas, como el Rey", confirmando públicamente que no se había consultado a La Zarzuela para ello. "Nos parecía poco respetuoso, además -dijo el director general- intentar traer al Rey aquí para una emisión experimental". Pere Cuxart intentó restarle toda importancia pública al olvido e hizo mención a la presencia de dos ministros -los ministros catalanes Serra y Lluch- en los saludos a la emisión. Tanto al principio, de la conferencia de Prensa, como en vanos momentos de Ia misma, el presidente del consejo de administración, Carles Sentís, hizo constar que el organismo que preside "se había subido al carro en marcha de la televisión catalana", de lo que se deduce que no tiene responsabilidades en los pasos dados, inversiones y nombramientos, que han debido ser refrendandos a posteriori.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_