Versiones originales
Un comentario de su crítico de cine hablando sobre la nueva serie de películas de Raúl de la Torre (suplemento de EL PAIS de 21 de agosto) me hace pensar que quizá para los puristas del cine o simples aficionados inteligentes hay la esperanza, en un futuro no muy lejano, de poder escuchar las versiones originales de las películas emitidas por Televisión Española.Todos sabemos que la voz de un actor o una actriz constituye un elevado porcentaje de su ser profesional. La mueca, la postura, el gesto, son importantes; pero es la voz, con sus modulaciones, la que establece la identidad del personaje interpretado. Los actores y guio-
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nistas pasan largas horas juntos para ensayar el efecto exacto deseado para convencer, engañar si se quiere, al espectador, un espectador previamente entregado a que le convenzan o engañen durante el espectáculo.
Si eliminamos las voces y el guión originales, y los sustituimos con otras voces y versiones del guión, perdemos casi todo el valor interpretativo de los actores doblados. Las magníficas voces de Paco Rabal o Fernando Fernán-Gómez carecerían de todo sentido si fueran dobladas. Si añadimos a todo esto que la voz doblada de Gary Cooper se escucha dos días después saliendo de la boca de Robert Redford o Karl Malden, no hace falta observar que los personajes proyectados por estos actores carecen totalmente de convicción.
Una vez expuestas estas obvias observaciones, quisiera sugerir una solución posible para este problema, que afecta a muchos telespectadores. Tengo entendido que en ciertos países orientales -Tailandia, por ejemplo; ignoro si el sistema existe en Europa- se puede escuchar y ver, naturalmente, la versión doblada de películas extranjeras en la televisión. Pero para los que quieran escuchar la versión original de la película perfectamente sincronizada sólo hace falta sintonizar un canal especial de la radio, y todo el mundo feliz.
Por supuesto, no todas las películas extranjeras merecen este tratamiento, pero sí reconocidas joyas del séptimo arte./
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