La barca que provocó la catástrofe de Ullibarri carecía de autorización

La barca que volcó y se hundió el pasado día 10 en el pantano de Ullibarri-Gamboa (Álava), dando lugar al accidente en el que perdieron la vida dos personas, carecía de permiso para navegar, según reconoció el consejero de Educación y Cultura del Gobierno vasco, Pedro Miguel Echenique, al responder en comisión en el Parlamento vasco a una pregunta sobre el particular formulada por Euskadiko Ezkerra.La barcaza formaba parte de un lote de cuatro embarcaciones, adquiridas hace un año por la Dirección de la Juventud del Gobierno vasco para transporte de personal, material y abastecimientos destinados al Campamento Infantil de Verano que la Administración autónoma organiza en la llamada isla de los Conejos y que acoge en cada turno a más de 1.000 niños.

El accidente se produjo cuando un grupo de 36 adultos, en su mayoría padres de los acampados, atravesaban los 600 metros que separan la isla de la orilla del pantano. La mala distribución del peso y el incumplimiento de ciertos requisitos de estabilidad y flotabilidad fueron, según manifestó el consejero ante la comisión, las causas de que la embarcación se hundiera. Pedro Miguel Echenique manifestó también que su departamento ha abierto un expediente administrativo para esclarecer las responsabilidades de lo ocurrido. Paralelamente, una encuesta judicial está en marcha y se realizan los peritajes encaminados a establecer si la embarcación y su tripulante reunían los requisitos exigidos para la tarea que realizaban, así como para determinar las posibles conculcaciones de la reglamentación sobre navegación en pantanos que pudieran haberse producido. En estos momentos, un segundo turno de niños pasa sus vacaciones en el citado campamento y las embarcaciones son utilizadas con normalidad.