El fracaso de la gira de George Shultz pone en peligro la unidad de Líbano

La incapacidad de Estados Unidos para conseguir que Siria retire sus tropas de Líbano aumenta el riesgo de una partición de hecho del territorio libanés entre las fuerzas sirias e israelíes, con el control del Gobierno libanés limitado a la región de Beirut, señalan expertos del Departamento de Estado, en un balance del viaje que su secretario, George Shultz, ha realizado a Oriente Próximo. El presidente Ronald Reagan fue informado ayer de los resultados de esa gira.Shultz ha tenido que reconocer a su regreso a Washington la evidencia de ese riesgo, lo que supone un golpe serio para la diplomacia norteamericana en la región.

El secretario de Estado, que ha repetido insistentemente la necesidad de una retirada "total y completa" de las fuerzas extranjeras de Líbano, se considera desarmado ante el rechazo "irrevocable" del Gobierno sirio de suscribir un acuerdo para la retirada de sus tropas.

Por otra parte, los seis miembros de la comisión negociadora de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) encargada de acercar las posiciones entre Yasir Arafat y Siria llegaron ayer nuevamente a Damasco.

Antes de abandonar Tunicia, la comisión difundió un comunicado en el que afirma que aún se respeta el alto el fuego pactado entre los leales de Al Fatah (el principal grupo de la OLP) y los rebeldes que piden la dimisión de Yasir Arafat.