Barrionuevo finalizará próximamente la actual reorganización policial con el nombramiento de comisarios provinciales

El ministro del Interior, José Barrionuevo, tiene previsto cambiar próximamente a varios comisarios provinciales de policía, según informan fuentes del departamento, con lo que se dará por concluida la actual reestructuración policial iniciada la pasada semana con el cese del subcomisario Mariano Baniandrés como jefe de la Brigada de Interior, que ayer fue despedido con un homenaje por sus compañeros. Pasado el verano, posiblemente en octubre o noviembre, se registrarán nuevos cambios entre altos cargos policiales. Los nombramientos fueron firmados ayer por Barrionuevo. Entretanto, en el propio ministerio se insistió ayer en el posible abandono del cargo por parte del subsecretario, Carlos Sanjuán.

Los dos principales sindicatos del Cuerpo Superior de Policía, el Sindicato Profesional de Policías (SPP) y la Unión Sindical de Policías (USP), han valorado positivamente los cambios registrados hasta el momento. En opinión de Manuel Novás, presidente del SPP, los relevos refuerzan al director general de la Policía, Rafael del Río. Para Modesto García, secretario general de la USP, los cambios son positivos, pero próximamente deben producirse otros para lograr una mayor eficacia policial. Por su parte, dirigentes de la Plataformna Unitaria de Policías, también valoraron positivamente los nombramientos, con excepzión del de José Manuel Blanco Lenítez, nuevo jefe superior de Policía de Sevilla.Según las fuentes informailvas consultadas ayer, los nombra mientos más positivos han sido los de Lorenzo López Corredera como comisario general de Seguridad Ciudadana, y Federico Bañares García, nuevo jefe superior de policía de Valladolid. Arribos, han dicho, "tienen unos pasados democráticos y son buenos profesionales".

Por su parte, el hasta ahora comisario general de SeguÍdad Ciudadana, Jesús Merino le la Hoz, nuevo secretario geleral técnico de la Dirección General de la Policía, manifestó a EL PAÍS que su nuevo destino es menos operativo que el anterior pero que, como funcionario, va al lugar que le ordenen. Precisó que en todo momento ha creído tener la confianza del ministro. Merino, miembro de la USP, añadió que los sindicatos policiales están realizando una labor positiva, no sólo defendiendo los intereses del Cuerpo, sino también intentando que la policía sirva más y mejor a la sociedad.

Pasados conflictivos

Los policías más destacados que ahora han sido cambiados de destino por Barrionuevo y nombrados para cargos de responsabilidad son los siguientes:Jesús Merino de la Hoz, secretario general técnico de la Dirección General de la Policía. Es ahora el número dos en la Dirección General de Policía. Ha sido expedientado y sancionado en dos ocasiones. La primera, en septiembre de 1979, siendo ministro del Interior el general Antonio Ibáñez Freire, por publicar en EL PAÍS una carta en la que apoyaba un editorial publicado en este periódico criticando unas declaraciones del entonces general Milans del Bosch al diario ABC. La segunda, en julio de 1981, por otro escrito difundido en EL PAÍS en el que criticaba con dureza la actuación de los policías que interrogaron al presunto etarra José Arregui, muerto por supuestas torturas. Se afilió a la USP, sindicato considerado próximo al PSOE, y fue presidente de la Comisión Jurisdiccional de la organización. En abril de este año, hizo llegar a Barrionuevo sus quejas por no haber sido informado sobre los preparativos de la operación de rastreo realizada en el barrio madríleño del Pilar. El mismo mes, se solidarizó públicamente con los policías nacio nales expedientados tras decla rar, en el programa En este país de TVE, que se debía desmilitari zar la Policía Nacional.

Lorenzo López Corredera, comisario general de Seguridad Ciudadana. Hasta ahora jefe de la Brigada de Exterior de la Comisaría General de Információn. Considerado buen profesional y sin implicaciones políticas. De él dependerán ahora los amplios dispositivos de protección y seguridad para la población, así como la seguridad de los altos cargos de la Administración.

Federico Bañares García, jefe superior de policía de Valladolid. Era comisario jefe de la comisaría madrileña de Entrevías, a la que pertenecían los mencionados policías nacionales expedientados. También se solidarizó expresamente con ellos, frente a las protestas de numerosos mandos de la Policía Nacional. Tras su nombramiento, varios jefes de este Cuerpo dependerán de él.

José Manuel Blanco Benítez, jefe superior de policía de Sevilla. En marzo de 1980 fue nombrado por Ibáñez Freire director general de la Policía, cargo que abandonó un año después porque Juan José Rosón, entonces ministro, aceptó la dimisión que le presentó tras el escándalo creado por el caso Arregui. En aquellas fechas, llegó a asegurar que Arregui no había recibido malos tratos. Ya fue jefe superior de Sevilla , así como de Valladolid. Se autodefine como "conservador liberal". Estaba destinado ahora en Huelva y, según diversas fuentes, el delegado del Gobierno en Andalucía, Leocadio Marín, pidió que fuera destinado a Sevilla.

Por otro lado, dirigentes de la Plataforma Unitaria de Policías (PUP), organización minoritaria en cuya creación participó Baniandrés, enviaron ayer a Barrionuevo un escrito de dos folios en el que le piden que presente su dimisión. Para el PUP, según se indica en el escrito, se ha producido una "grave frustración" para la policía por las esperanzas que tenía el colectivo en el actual ministro. Concretamente, entiende que el proyecto de unificación policial está "viciado por las presiones de estamentos militares y otros sectores no progresistas". Para el PUP. La dimisión de Barrionuevo es una cuestión "necesaria y urgente".