Umbral y De la Cierva

Siento mucho no conocer en toda su extensión la polémica entre Ricardo de la Cierva y Francisco Umbral aludida en la carta de J. Luque (EL PAIS, 21 de junio). En Abc se señala que Umbral no ha contestado por ahora, por lo que todo debe ser más bien un monólogo.El pequeño lapsus de Umbral tiene poca importancia: es más grave que los historiadores que tanto presumen de científicos se atrevan a afirmar -sin base en los textos estrictos-, como hace De la Cierva, que "las últimas investigaciones concluyen que la alianza formal de Roma con Sagunto se concierta hacia el año 220 -(221, según J. Mangas)-, seis años después del Tratado del Ebro", poniendo fecha a una cuestión más que problemática fundándose únicamente en "un hecho admitido generalmente" (J. Mangas).

Precisamente, Polibio (111, 30, 1) nos dice: "Era un hecho reconocido que los saguntinos, muchos años antes de 4a época de Aníbal, ya se habían acogido a la protección de los romanos". Por tanto, si, según De la Cierva, Aníbal, "indignado por la alianza", marchó sobre Sagunto debió mantener en conserva su indignación durante muchos años.

Estoy segura de que De la Cierva, historiador científico, sigue creyendo, como sus colegas, que el río Ebro del pacto con Asdrúbal es el actual: no le vendría mal una pequeña dosis de la imaginación de Umbral que le ayudara a pensar que los límites se establecieron en el río Ebrón, que vierte sus aguas en el Guadalaviar o Turia, quedando al sur de Sagunto, que se encuentra situada, según Tito Livio (21, 7), "ultra Hiberus", es decir "allende el Ebro" (FHA, III, 246). Igualmente, Polibio (111, 30, 2) reconoce que "los cartagineses no tenían razón cuando provocaron la guerra, a pesar del tratado de Lutacio por el que se extendía a los aliados de ambos bandos la seguridad pactada entre ambos pueblos", y que en el tratado de Asdrúbal "se prohibía a los cartagineses llevar la guerra más allá del río llamado Ebro" (Polibio, II, 13, 7); el profesor Bosch Gimpera ya observó que cuando Polibio se refiere a este río, para diferenciarlo del actual Ebro suele añadir "el llamado Ebro por los indígenas". En resumen, si los historiadores científicos, al considerar quiénes fueron los culpables de la guerra, cuestión tan importante, confunden a cartagineses y romanos, el lapsus de Umbral se reduce a la nada./