Por cada 1.000 viviendas construidas se produce un accidente que cuesta la vida a un trabajador

Construir 1.000 viviendas lleva consigo un accidente mortal en obra, según manifestó Gerardo de Gracia, responsable de seguridad e higiene de la federación de construcción de CC OO, en una conferencia de prensa celebrada ayer. La siniestralidad en el sector, de acuerdo con un estudio elaborado por la citada federación, se ha ido incrementando en los últimos años.De acuerdo con el citado documento, cada día laboral muere un trabajador de la construcción como consecuencia de los accidentes graves, por patologías no traumáticas (desmayos o infartos) o in itinere. El mayor porcentaje en las causas de los accidentes se registra en las caídas -entre el 35% y el 40%-, seguido por los atrapamientos, que suponen entre el 15% y el 18%. El resto de los accidentes tienen como causas electrocuciones o golpes.

El documento señala que los accidentes mortales en construcción son prácticamente constantes: 234 en 1980, 230 en 1981 y 226 en 1982. La ligera caída de las cifras es únicamente aparente, ya que, relacionando estos datos con la población activa, la tasa de siniestralidad en construcción por 10.000 trabajadores resulta de 2,27 en 1980, 2,40 en 1981 y 2,53 en 1982.

Enfermedades profesionales

Además de los datos citados, el informe subraya que cada día laboral quedan inútiles de dos a tres trabajadores por secuelas de accidentes, a lo que habría que añadir las enfermedades profesionales que la propia Administración "ni se atreve a reconocer". A este respecto, Gerardo de Gracia indicó que durante el año 1982 sólo se habían catalogado cinco casos como enfermedades graves a nivel estatal.A juicio de CC OO, la mayoría de los accidentes se debe a la falta de medidas de seguridad, aseveración que, según De Gracia, es perfectamente demostrable, al menos a nivel de la provincia de Madrid, por los informes elaborados por los inspectores. Como otro importante factor de siniestralidad, el documento cita la contratación temporal y los destajos.

Precisamente el tema de la seguridad será objeto de una campaña patrocinada por CC OO contra otra de carácter institucional que, según esta central, trata de responsabilizar a los trabajadores de los accidentes en construcción.

Gerardo de Gracia insistió en que la Administración debía ser la primera en exigir el cumplimiento exacto de las normas de seguridad, y a este respecto citó que, así como en el Reino Unido los accidentes producidos en obras de promoción pública representaban el 50% de los registrados en la promoción privada, en España se había dado el caso de que en las obras realizadas por Visomsa (de promoción oficial) se habían producido 11 accidentes mortales en 10.000 viviendas, hecho que, según sus palabras, la propia Administración ignoraba.