Los combates por el control de Faya Largeau, en Chad, han causado alrededor de 800 muertos

Los intensos combates que enfrentan en el norte de Chad a las fuerzas gubernamentales del presidente Hisen Habré y grupos rebeldes del ex presidente Gukuni Uedei, apoyados por la aviación libia, han provocado ya cerca de 800 muertos, según las últimas informaciones recibidas en París por la agencia Efe.En las últimas horas los combates por la conquista del oasis de Faya Largeau, en el norte de Chad, se han endurecido notablemente, pero no han sido confirmadas las informaciones que aseguaraban que las tropas de Gukuni Uedei se habían apoderado de la ciudad.

El encargado de negocios de Chad en París, Alammi Ahmed, desmintió ayer categóricamente la caída de Faya Largeau. El portavoz del llamado Gobierno de Unión Nacional de Transición de Chad (GUNT), que dirige Uedei, había indicado que la ciudad, tras intensos combates que se iniciaron en la mañana del jueves y se interrumpieron por la noche, cayó finalmente ayer por la mañana en manos de los rebeldes, informa France Presse.

Sin embargo, el Gobierno oficial chadiano asegura que, "a pesar de los importantes medios puestos en acción por los asaltantes y del apoyo aéreo libio, las fuerzas armadas nacionales lograron rechazar los asaltos de las fuerzas enemigas", compuestas de "marionetas chadianas". El comunicado afirma que los rebeldes se encuentran a 25 kilómetros de la ciudad y que prosiguen los combates.

El enviado especial de France Presse en la capital chadiana, Yamena, informaba ayer de que se libraban fuertes combates en Faya Largeau, tras la calma nocturna, y que todos los puestos de avanzada, grandes ejes de circulación y las alturas que dominan el palmeral de la ciudad se encontraban en manos de las FANT (las fuerzas del primer ministro Hisen Habré). Sin embargo, la fuente de la información era un oficial del Ejército chadiano, lo que no despeja las dudas sobre la veracidad de la versión.

Entretanto, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Claude Cheysson, declaraba en París que el envío de tropas libias a Chad sería "un verdadero desafío a la comunidad internacional" ante el cual Francia no no podría quedar "indiferente".