La regionalización de los bancos de Rumasa, pendiente del informe del Banco de España, según CC OO

El plan de regionalización del grupo bancario de Rumasa se encuentra pendiente del informe preceptivo del Banco de España antes de ser aprobado por el Gobierno, según puso de manifiesto ayer Agustín Moreno, responsable del grupo de trabajo creado por CC OO para el seguimiento de la expropiación de Rumasa. El plan de regionalización parte de la reestructuración de los bancos del grupo en 12 entidades distribuidas en las diferentes comunidades autónomas. CC OO ha anunciado su oposición a la reprivatización de Rumasa y su intención de presentar una denuncia formal por incumplimiento del Estatuto de los Trabajadores.El plan de regionalización del grupo bancario de Rumasa, como paso previo a su reprivatización, parte, según CC OO, de reagrupar las entidades bancarias en 12 bancos, algunos de nueva creación, distribuidos en las distintas comunidades autónomas. Con este plan existiría un banco nacional, el Banco Industrial del Sur, y otros 11 de carácter regional. En Andalucía quedaría el Banco de Jerez; en Extremadura, el Banco de Extremadura; en Castilla-León, el Banco del Oeste; el Banco del Noroeste correspondería a Galicia; la Banca Masaveu, en Asturias y Cantabria; el Banco del Norte correspondería a Euskadi, Navarra, La Rioja y Aragón; en Cataluña y Baleares, el Banco Comercial de Cataluña; en Castilla-La Mancha se crearía un nuevo banco, el Banco de la Mancha, desapareciendo el de Toledo y Albacete; en Madrid quedaría el Banco General; en Canarias se crearía el Banco Insular, y en la Comunidad Valenciana y Murcia quedaría el Banco del Este.

De acuerdo con las informaciones suministradas por CC OO, el plan se encuentra pendiente del informe preceptivo del Banco de España para su aprobación por el Gobierno. Y sería el primer paso para el saneamiento del grupo antes de pasarlo nuevamente al sector privado. De esta operación quedaría excluido el Banco Atlántico que tiene un tratamiento diferenciado.

Por otra parte, en cuanto a la situación actual del grupo bancario, las citadas fuentes manifestaron que el saldo negativo de la retirada de depósitos asciende en estos momentos a 121.000 millones de pesetas (41.000 millones más que en el momento de la expropiación). El déficit patrimonial del Rumasa, como cabecera del grupo del grupo de empresas, es a 31 de diciembre de 1982 de 200.396,87 millones de pesetas, cifra que según CC OO, ha sido facilitada por la propia Administración.

Agustín Moreno señaló que CC OO había presentado ante el Gobierno Civil la personación de esta central en el expediente de expropiación. Al mismo tiempo, significó que el sindicato temía la intención de denunciar a la Dirección General del Patrimonio por incumplimiento del Estatuto de los Trabajadores, al no haber dado, como es preceptivo, información a los comités de empresa sobre los resultados del grupo.